Por Osvaldo La Spina – Fotos: Salvador Hamoui

Con más de 1.600 metros cuadrados de construcción, enclavado en un lugar paradisíaco sobre las márgenes del majestuoso río Paraná, entre el balneario municipal y el Parque Leandro N. Alem en la zona norte de la ciudad, el «Acuario del Río Paraná» ya muestra sus detalles arquitectónicos más salientes en cuanto a su orientación hacia el este, ventanales amplios, sendas peatonales, paseos, recreación y atractivos espacios verdes para disfrutar en familia.

Conclusión ingresó al complejo ictícola en donde Andrés Sciara, investigador del Conicet y coordinador del proyecto, dijo que «la secretaría de Ciencia y Tecnología de la provincia de Santa Fe subió la apuesta y no sólo será una mera muestra de peces, sino que va mucho más allá. Se va a interactuar entre la investigación, divulgación y esparcimiento vinculado a todas las instituciones de la comunidad que estén interesados o relacionados con el río».

El Acuario es un proyecto emblemático para la sociedad santafesina que trasciende el presente y sienta bases para pensar en un futuro sustentable. Logra poner en valor el conocimiento resolviendo problemáticas regionales que afectan uno de los recursos no renovables más importantes de la región: el río Paraná. Al mismo tiempo, promueve una cultura ecológica socialmente responsable que respete y preserve su ecosistema y medio ambiente en la dinámica económica social y cultural.

El proyecto «Centro Científico, Tecnológico y Educativo Acuario del Río Rosario» se enmarca en el giro de la visión estratégica que viene teniendo la ciudad respecto de su entorno natural en los últimos años. El delta del río Paraná con sus islas conforma un ecosistema de gran riqueza que atrae visitantes de lejanas latitudes, quienes se impresionan ante la peculiaridad de su geografía y la diversidad de su flora y fauna.

«El proyecto permitirá reabrir un espacio postergado con el objetivo de articular la capacidad que poseen quienes desarrollan el conocimiento en nuestra región, para ponerlo al servicio de construir una relación más armónica entre el hombre y su hábitat», destacó Sciara.

Lo innovador de este lugar, al menos en las experiencias conocidas de acuarios del país, es que lo educativo tenga tanta importancia como el de generar y divulgar nuevos conocimientos.

Los acuarios en el mundo tienen mucha importancia en la conservación de las especies. Con relación a esto, el coordinador del proyecto contó: «Es un granito de arena por como trabajan las organizaciones ecologistas. Saber la riqueza que existe en el río, estudiarlo, mostrarlo a la comunidad y divulgarlo para así poder entre todos protegerlo».

Un tema que siempre estuvo candente es la vía de comunicación terrestre del puente Rosario-Victoria, pues el dragado que se hizo para darle mayor profundidad al río, para facilitar el paso de los buques de mayor calado, pudo haber influido en la pérdida y reproducción de las especies autóctonas de la zona. En relación a este tema, Alexis Grimberg, técnico en Acuicultura y responsable técnico del proyecto, afirmó: «No se estudió a ciencia cierta ese impacto ambiental. Lo que sí se sabe es que hay especies que migraron, que ya no vienen más a estas zonas pero desde antes que se construya el puente».

Además, Grimberg contó que «otro de los temas que va a difundir el acuario son las más de doscientas especies que viven debajo de las marrones aguas del río Paraná. Por lo general el común de la gente conoce un reducido número, usualmente las que se exhiben en los puntos de ventas».

En un principio, de este gran número de especies se exhibirán setenta u ochenta en condiciones de cría especialmente desarrolladas para que se pueden desarrollar plenamente.

La investigación permitirá establecer las bases científicas y tecnológicas para el manejo sustentable de los recursos naturales del río a través de estudios genéticos de las distintas especies que lo habitan, el establecimiento de técnicas de reproducción, cría y domesticación y el desarrollo de herramientas biotecnológicas para el mejoramiento de la producción de peces con interés económico.

Además, el acuario tendrá como fuerza motora la participación de los actores locales que a lo largo de los años vienen trabajando en conservación, investigación y transferencia al medio.

Arquitectura 

La planta alta, con forma de un habitáculo rectangular, estará dedicada a la información educativa. Son 1.600 metros cuadrados cubiertos. Si bien habrá peces, la idea es incorporar recursos interactivos puestos al servicio de la educación.

A su vez, en planta baja se desarrollará todo el laboratorio de investigación con ventanales muy amplios en donde el visitante podrá ver a los científicos e interactuar con visitas guiadas al público.

Además el proyecto cuenta con un gran espacio aéreo de terraza muy abierto con mesas y sillones. Se podrá disfrutar y al mismo tiempo contemplar un hermoso paisaje del extenso río Paraná.

Se cuenta con un equipo de científicos trabajando para mostrar lo que no se conoce todavía del río. Las pantallas táctiles interactivas mostrarán los peces y las características de cada uno, en qué estado de conservación se encuentra, y otras características sorprendentes y desconocidas de quienes habitan el Paraná. Además se mostrarán las características de los ciclos anuales en el desarrollo de los ecosistemas del río. Habrá por supuesto agua: una gran pecera principal, dos cilíndricas y 7 peceras contra la pared que suman más de 200 mil litros.

Paseo del Acuario

Dos hectáreas del «Acuario del Río Paraná» están habilitadas como un nuevo paseo al lado del río. Este paseo se enmarca en un proyecto denominado “Parque Autóctono del Humedal”, espacio público que se enriquecerá mediante el rescate y domesticación de especies vegetales de la región. Allí se realizará un recorrido que recreará los principales ambientes naturales del humedal Litoraleño.

Este domingo, autoridades provinciales y municipales inaugurarán este sector en un acto que será a partir de las 16, con entrada libre y gratuita.

Los pescadores

Actualmente uno de los vínculos más importantes que tiene el acuario es el que se lleva adelante con la «Asociación Civil el Espinillo», un grupo de pescadores que trabaja en la zona del espigón frente al club Regatas.

«Se ha entablado una relación de trabajo y cooperación muy importante con ellos. Los pescadores nos aportan su experiencia en el conocimiento del río, sus especies e historia», enfatizó Grimberg.

Se les brindará un espacio de amarre para sus canoas, que incluye una sala frigorífica para conservación y venta de sus productos que provienen de la pesca artesanal responsable.

Conclusión siguió indagando a los dos responsable de este gran proyecto. «Se trabaja también entre otros con la Asociación Rosarina de Pesca Con Mosca (ARPEMO), grupos ecologistas, el Club Rosarino de Acuariofilia (CROA) y científicos de las más diversas áreas por ejemplo la arqueología, como Julieta Sartori», dijo Sciara.

A través de recorridos amigables, niños, jóvenes y adultos experimentarán con sencillez el proceso de investigación científica y su aplicación al medio. Podrán curiosear, jugar, preguntar, estimular su creatividad, y aprender sobre los recursos naturales del río. Construir, en definitiva, un conocimiento que posibilite el mejoramiento de la calidad de vida y el desarrollo sustentable, en ejercicio de una ciudadanía responsable en armonía con el medio ambiente.

Más información: https://www.facebook.com/AcuarioRioParana