Por Aldo Battisacco – Enviado especial a Buenos Aires 

La socióloga de la UBA  y asesora presidencial, Dora Barrancos, se mostró optimista respecto del clima que se vivió en Diputados para la aprobación de la Ley Interrupción Voluntaria del Embarazo, y expresó que fue un «proceso, que concluye en un día extraordinario, porque se lo vino acariciando». En cuanto al tratamiento que deberá abordar el Senado dijo que «la adecuación del proyecto aprobado en Diputados facilitará que sea ley».

El proyecto que prevé la Interrupción Voluntaria del Embarazo, que ya había sido aprobado por Diputados en 2018, obtuvo media sanción con 131 votos a favor, 117 en contra y 6 abstenciones, Es decir, la diferencia a favor fue más amplia: dos años atrás había recibido media sanción con 129 votos positivos, 125 negativos y una sola abstención.

«Es una perspectiva completamente diferente, de la que ocurrió hace dos años, aún con el todo el optimismo de entonces» y diferenció que «estamos en un clima completamente diferente, político y de representación», recordó Barrancos. 

Consultada por Conclusión si el tratamiento y el resultado le generó tranquilidad o expectantica, respondió que le aportó «mucha tranquilidad, fue todo más sereno, menos crispado y con una exigencia de que no hubiera agresiones, vituperios y sobre todo insultos, todo eso se saldó». 

Sabíamos que la traba estaba en la contra convicción

En relación a los cambios que se le introdujeron al texto de la ley, Barrancos consideró que fue «muy sensato, eran fórmulas a negociar», se trata de ese plano «de aceptación o conciencia institucional, que siempre es muy polémica, porque las instituciones no tienen conciencia, si su carnadura».

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La socióloga caracterizó que se «saldó bien» porque «hay responsabilidad inherente, no queda así nomás» ya que «si una persona requiere de atención para la interrupción, la institución tiene que reenviarla a costa de ella», aludió categóricamente sobre los alcances de la objeción de conciencia. 

Senado

Respecto del tratamiento en el Senado, la especialista, manifestó que «estos pasos de adecuación en el proyecto», son positivos para que «efectivamente en el Senado, tengamos expedito el camino para su sanción. Es una apuesta, y apuesta, es un término existencial muy bello, en fin, militar para que así sea esta vez». «La vez pasada también, pero era adverso el contexto».

Preguntada si hubo algún punto que le hizo ruido, Dora Barrancos expresó que «no, las negociaciones que llevaron a esta transformación son muy razonables, así que a tener ley». 

Respecto del año de gestión del Gobierno, apuntó que «no se quedó quieto, se pudieron haber cometido errores, pero el enorme cúmulo de ventajas traídas para resolver la pandemia, no hubo omisiones».