Aldo Battisacco – Conclusión en Córdoba

El extitular de la Sociedad Rural de Córdoba y actual vocal de la entidad, Pedro Salas, dialogó con Conclusión y destacó la agenda de prioridades establecida de cara a lograr mejor y mayor capacidad asociativa con la creación de nuevas cooperativas que potencien el trabajo y el bienestar de los productores, con la participación del Estado a través del Inaes y Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca de la Nación.

Salas explicó cuál es el desafió tras el ingreso de Argentina a los BRICS, y expresó que esta nueva realidad «coloca al país una alternativa que nos ubica ante un gran mercado consumidor de alimentos, energía y tecnología, y de lo  que se desarrolla y produce. Argentina está consolidando el auto abastecimiento energético» y agregó que fue invitado a un acto en el que se trabajaba en un nuevo gasoducto» como polo de desarrollo importante para el desarrollo de la minería, saltando de la extracción a la industrialización».

El dirigente agrario, precisó que de igual modo sucede con «el 95 por ciento de la soja, que sale en aceite y harina, también productos alimenticios. Está pendiente el desarrollo del maíz, porque el 30 por ciento queda en el país y el resto se vende en granos, el objetivo es vincularlo a la ganadería. Son materias pendientes que requiere de organización colaboración y trabajo entre el Estado, los trabajadores y la empresa, para mejorar niveles de actividad, rentabilidad y distribución para el bienestar general».

Pedro Salas, fue categórico a la hora de caracterizar el presente político de Argentina donde «la disyuntiva política es definir qué tipo de capitalismo nos va a regir en los próximos años, o tenemos un capitalismo de producción, trabajo y desarrollo o un capitalismo de especulación, fuga y deuda como el que padecimos que nos dejó este hueco con el crédito con el FMI, para fugar capitales y consolidar la bicicleta financiera que nos destruyó».

Para el expresidente de la Rural, «la labor de Luis Contigiani es extraordinario, porque potencio la producción y fabricación de alimentos generando un perfil nuevo a las economías regionales, que necesitan una mirada de coordinación con el Estado organizando las actividades, porque en condiciones anárquicas terminamos como en el 2001».

En relación al destino productivo de Argentino, Salas descartó la dolarización, al referir que «es absurdo plantearlo, porque no tenemos dólares, un salario llegaría a los 10 dólares, hablamos de fantasía y magia y la sinrazón. Es fácil vender magia. Es fácil destruir y difícil construir, decir vamos a pasar una moto sierra o dinamitar es fácil y se puede hacer en un minuto, plantear el bombazo y el odio no sirve en la construcción, porque un país necesita un proyecto armonioso» para los empresarios y trabajadores.

«El desafío es ocupar y calificar el trabajo», apuntó Salas, y contó que «Argentina muestra en el norte del país y Córdoba un déficit energético y el pago de la energía es caro, esto impacta en los costos, pero con volúmenes de gas importante para mover fabricas y mano de obra, todo cambia». «El potencial humano hace que Argentina, sea el país que más exporta tecnología y contenido. Solo nosotros en Latinoamérica producimos satélites».

Respecto de la profundización del rol de las cooperativas en la realidad productiva nacional, Salas manifestó que se trabaja en la integración de las sociedades rurales regionales, «que piensan igual que nosotros, donde se busca la mejora del productor, en el norte de Córdoba el 20 % de los ganaderos chicos no tienen las escrituras de sus campos, e instamos a que se organicen en cooperativas y que le sirva para encontrar unidades de coordinación para mejorar su rentabilidad. Esto es lo que apoyamos». 

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