El bloqueo aplicado por Estados Unidos al biodiésel argentino comienza a generar tensión en relación al precio de la soja entre los actores del rubro.

El precio de este “commodity”, corazón de la cosecha local, inevitablemente caerá. Un prolegómeno de esto, pudo observarse la última semana, cuando subió 27 dólares el precio internacional del aceite de soja sin impacto alguno en la plaza local.

Es el resultado de la suba de aranceles para el ingreso del principal producto que exporta el país a Norteamérica y que representa el 25% de los embarques hacia allí.

Coletazos de esta decisión ya perfilan el escenario de la Sociedad Rural, cuyo presidente Luis Miguel Etchevehere advirtió a los exportadores que “no hay razón para una baja en los valores”.

El dirigente agropecuario, reflejó así  el aumento de la tensión entre exportadores y productores, en torno al mercado del biodiésel, elaborado con aceite de soja.

Es que la medida adoptada por la Casa Blanca dejó las estanterías en movimiento. Desde Ciara, organismo que agrupa a aceiteros, aseguran que la cotización de la soja “bajará”, contradiciendo al titular de la Sociedad Rural.

Argentina ocupa el primer lugar en la exportación de aceite de soja con una participación en el mercado internacional del 48,1%.

Sin la posibilidad de colocar el producto en Estados Unidos, sobrarán 7,5 millones de toneladas de granos de soja, cantidad utilizada para elaborar el biocombustible que se enviaba al país del norte.

Mientras, los exportadores esperan un guiño de la Unión Europea que habilite el ingreso de biodiésel a esas tierras, trabado por ese organismo continental ante la Organización Mundial de Comercio hace algún tiempo.