La situación económica del país repercute en diversos sectores y uno de los más comprometidos es el del comercio. Conclusión realizó un relevamiento por negocios de la zona del microcentro de Rosario para conocer la situación de los locales en la actualidad y en relación al año 2015.

En nuestra ciudad los responsables de negocios expresan que las ventas han bajado con respecto al año pasado. Locales de calzados, de indumentaria, librerías, entre otros rubros fueron consultados por Conclusión sobre el presente de la actividad en la ciudad.

Algunos comerciantes confirmaron que se produjo un menor número de ventas con respecto a la misma época del año pasado. La encargada de una librería del centro comentó una de las razones de la caída de las ventas. «Las editoriales están aumentando bastante los precios y a la gente ya no le sobra la plata como para darse el gustito de un libro. Entonces empieza a pensar mucho si se compra o no un libro. Se nota la baja de ventas. Porque ya no es algo que puede hacer tan seguido».

Por su parte, en otro local de expendió de libros de Rosario consideraron que «se nota bastante la baja de las ventas en relación a 2015, incluso los precios han subido y aún así no se llega a los mismos números de recaudación que el año pasado», expresaron desde detrás del mostrador.

«El aumento de precios incidió bastante. El poder adquisitivo de las personas bajó considerablemente. Hay descuentos o promociones que se hacían el año pasado que ya no se pueden hacer», explicó el encargado del local.

En uno de los tantos locales de indumentaria del centro de la ciudad los diferentes aumentos de tarifas, costos de mercadería se sienten con fuerza. «Las ventas bajaron muchísimo. Han caído aproximadamente el 50 por ciento. A veces la gente prefiere algo de menor calidad, pero más barato, los consumidores está buscando mucho el menor precio.

Una constante es la referencia al plan de cuotas Ahora 12. Según mencionan los encargados de locales, el programa representa una gran ayuda para el sector, ya que muchos clientes se vuelcan al pago a largo plazo para poder adquirir determinados productos que de otra forma sería imposible. «La verdad es que los clientes se basan mucho en la cantidad de cuotas. Se manejan con Ahora 12, por eso hay más ventas los fines de semana», detallan los vendedores.

En cuanto al calzado infantil, el responsable de uno de los grandes comercios del microcentro, consideró que «nosotros estamos trabajando más o menos bien porque tenemos un rubro especial. Sé que en general está más tranquilo, pero creo que el problema es general. Eso es lo que hablamos con la gente, tanto los proveedores como los clientes».

Por su parte, en uno de los comercios textiles del centro mostraron otro panorama. Marcaron que «estamos bien, estamos repuntando. No nos podemos quejar. Hasta ahora vamos bien, no se nota la diferencia con respecto al año pasado, para nada». El motivo del repunte radica en la época del año, ya que se trata de los meses de mayores ventas debido a las fiestas de fin de año, eventos, graduaciones, entre otros.

La baja de las ventas generó un gran número de locales cerrados en la ciudad. Ya son 1.942 los negocios que debieron cerrar sus puertas en Rosario. Según un estudio de Concejalía Popular, de abril a esta parte se incrementó en un 30 por ciento el número de locales vacíos.

Las principales causas son el aumento de los alquileres, las tarifas de servicios, los impuestos y otras cargas. Todo esto, incrementado por la baja en las ventas que se registró en lo que va de 2016.

En Buenos Aires

En el Gran Buenos Aires y Capital Federal unos 3.200 comercios cerraron sus puertas en los últimos cuatro meses y dejaron en la calle a casi 13 mil trabajadores, a raíz de la baja en las ventas.

Los datos surgen de un informe de la ONG Defendamos Buenos Aires, el cual señala que 1.754 comercios dejaron de funcionar en el ámbito porteño y 1.446 en el bonaerense. Las zonas donde se registró un impacto fue en el centro porteño y los barrios de Belgrano, Almagro y Balvanera en Capital Federal.

En la provincia de Buenos Aires, Mar del Plata fue la ciudad más castigada, seguida por La Plata. El presidente de Defendamos Buenos Aires, Javier Miglino, resaltó que «muchos comerciantes y pequeños empresarios no pudieron evitar el cierre, pese a que han intentado formar comités de crisis y reestructurar deudas que no pueden pagar o incluso renegociar deudas con bancos, empleados y proveedores».