Por Aldo Battisacco

El titular de la Unión Obrera Metalúrgica de Zárate y Campana, Abel Furlán, acusó al Gobierno nacional de «carecer de política industrial», y no preocuparse «por el destino de la industria del país». El metalúrgico fustigó además al presidente Mauricio Macri por permitir la «importación indiscriminada de acero chino a precios subsidiados desde el país asiático» y abundó acusando que «el primo de Macri hará un gasoducto en Córdoba con acero chino». El conflicto se desató en la planta de Tenaris debido a la crisis en el sector metalmecánico, la situación amenaza a los trabajadores con millones de despidos.

Tenaris – Siderca

La planta está equipada con la más alta tecnología y es considerada una de las plantas más eficientes e integradas de su tipo en el mundo. La capacidad de producción anual es de más de 900.000 toneladas de tubos sin costura y produce una amplia gama de productos para el mercado energético, automotriz, con aplicaciones a la agro-industriales y exportaba más del 70% de sus productos de alto valor agregado a todo el mundo.

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Planta de Tenaris Siderca en Campana

El mercado internacional se resintió por la caída de los precios del petroleo, y redujo la demanda de tubos sin costura de las plantas que lo fabrican en el mundo.

Esta situación impactó directamente sobre la firma Tenaris-Siderca, que desde hace más de 60 años fue un importante protagonista en el desarrollo del mercado del petróleo y gas en Argentina a partir del establecimiento de la planta en la ciudad de Campana en 1954. El contexto internacional y nacional en materia económica resintió la capacidad productiva de la firma e impactó en los trabajadores, por falta de actividad en el sector.

En diciembre de 2015, la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y la empresa Tenaris-Siderca, del Grupo Techint, acordaron en el ministerio de Trabajo de la Nación la reincorporación de 189 operarios que fueron despedidos del establecimiento de Campana.

Conclusión dialogó con el secretario general de la UOM Zárate-Campana, Abel Furlán, quien además es diputado nacional por Buenos Aires. El dirigente manifestó que «la crisis internacional del petróleo generó una caída de la producción bastante pronunciada, a pesar que la planta tiene la capacidad de producir por mes 92 mil toneladas, sin embargo está produciendo 18 mil toneladas, dependiendo sólo del mercado interno desde hace 11 meses».

«Por otra parte -dice Furlán- se está deteriorando la fábrica porque la inversión ya prevista entre el Gobierno y Chevron en mitades iguales de 6.500 millones de dólares por año se han reducido a la mitad. Por lo cual fue necesario acordar con Tenaris Siderca, que no haya despidos y la salida fue pactar suspensiones progresivas y rotativas, pero percibiendo el 80% del salario», manifestó el dirigente.

«Esto resultó hasta hace poco -señaló el sindicalista- y se sobrellevó la situación entre Tenaris y las empresas contratistas, que finalizaron sus contratos en octubre de 2015, fueron renovando mensualmente los mismos ante un cambio de escenario, parece ser que hay una decisión política por parte de Tenaris de dar por concluido la vinculación con las contratistas Loginter (carga de buques) y Comau (mantenimiento de la planta), el resultado fue 320 trabajadores despedidos y que fueron posteriormente reincorporados porque el ministerio de Trabajo, dictó la conciliación obligatoria», describió preocupado.

Consultado por Conclusión acerca de cuáles son las perspectivas de continuidad laboral si las condiciones internacionales y nacionales no tienen viso de modificarse, Furlán respondió que «no hay expectativa en el corto y mediano plazo de que el mercado mundial mejore, se espera que persista por un tiempo prolongado» y agregó: «Es grave, porque el mercado interno se resintió gradualmente por la caída de la economía y tenemos recesión».

Por otra parte, sostuvo el secretario general de la UOM Campana que «el tarifazo eléctrico perjudica a las industrias, porque deben encarecer los costos de sus productos, pero la más grave de todo esto es la apertura indiscriminada de importaciones, la prueba es el gasoducto que se construirá en Córdoba que necesita para construirse 55.000 toneladas de tubos sin costura, se hará con tubos chinos, la empresa que hace la obra es Iecsa, del primo de Macri, que hará el gasoducto en Córdoba con acero de China, y esto atenta contra el trabajo argentino», reveló Furlán.

Preguntado sobre porqué se retiraron los subsidios que protegen el trabajo argentino y sus productos y se permite el ingreso de importaciones que están subsidiados por otros estados, el metalúrgico respondió que «es indignante, no hay política industrial. Macri leyó una hora en el Congreso y no le dedicó un solo párrafo a la industria, por lo tanto, si se miran las medidas desde que asumió la Alianza Cambiemos (UCR-PRO), va en contra de toda lógica, se pregona que se defenderá el empleo y se deja abandonada la realidad productiva del país».

«La UOM acompañó el reclamó de las Pymes que aglutinan a 40 o 50 trabajadores, que vieron comprometida su situación por el costo de la energía y que amenaza el destino de la industria metal mecánica en todas las líneas, por esto propone un comunicado con todas las cámaras del sector para hacer oír sus demandas».

Días pasados, el secretario general de la UOM se mostró preocupado por la situación laboral del sector, y ratificó que ya son más de 3.000 los despedidos y que otros 4.000 fueron suspendidos.

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«Estamos esperando que desde los ministerios nacionales nos atiendan para dejar sentado el reclamo y dialogar acerca de cómo serán las estrategias para defender la producción y el trabajo, los ciudadanos saben que un país que no tiene industria no tiene futuro, costó recuperar la actividad fabril que desapareció en los noventa. Si entramos en recesión todo se destruye en pocos meses, pero lleva mucho tiempo recuperar los destruido. Corremos el riesgo de perder millones de puestos de trabajo, no hay improvisación en todo esto, el silencio lo dice todo» concluyó Abel Furlán.

Desde la UOM de Villa Constitución, se manifestaron preocupados por el cese de labores de la planta  Laminados Industriales por falta de producción que registró en los últimos meses. La empresa se dedica a la fabricación de chapas para la industria naval y en estos últimos meses no hay demanda. La decisión afectó a 60 trabajadores.

El sindicalista Héctor Ibarra dijo: “Villa Constitución y su zona vive de la industria metalúrgica, si no hay acuerdos, siguen con las importaciones y sin obra pública, lamentablemente van a ser muchos los compañeros metalúrgicos que se queden sin sus puestos de trabajo”.

Según un comunicado de Alacero, emitido en Santiago de Chile el 25 de febrero de 2016, la producción de acero cayó en Latinoamérica. Las cifras correspondientes al año 2015 cerraron con una disminución en el consumo de acero laminado en América Latina de 4%. Por otro lado, la producción regional de acero crudo como de acero laminado disminuyeron 3% y 5%, respectivamente, respecto de igual período de 2014.

Las importaciones de acero llegan a un 36% para satisfacer la demanda regional, y nada indica que esta tendencia decrezca. El resultado de esta situación mantiene negativa la balanza comercial de la región, a pesar de que en 2015 el déficit en toneladas disminuyó 0,8% vs. 2014.

Cabe recordar que Alacero es la Asociación Latinoamericana del Acero, es una entidad civil que reúne a la cadena de valor del acero de América Latina. Las empresas miembro de Alacero desarrollan sus actividades en 25 países, y su producción -cercana a las 70 millones de toneladas anuales- representa el 95% del acero fabricado en América Latina.