En la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) y la Asociación Empresaria de Rosario (AER) hay preocupación. El nivel de actividad no logra recuperar los números de la prepandemia por el bajo poder de consumo de la población y las fechas clave, como el inicio de clases, no alcanzan a recomponer la caída. Ante la posibilidad de regresar a un escenario de mayores restricciones a la circulación para reducir la capacidad de transmisión del coronavirus, las alarmas vuelven a encenderse. Aseguran que sería un golpe «letal» para un gran número de comercios.
Ricardo Diab, titular de AER y vicepresidente 2do de Came, adelantó ante Conclusión que «seguramente», al dar a conocer los datos correspondientes a marzo de 2021, «el promedio de los tres trimestres va a estar por encima de un 6 por ciento de volumen negativo con respecto a los tres primeros meses del año anterior».
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El referente sectorial hizo una aclaración importante: las estadísticas que aparecerán en los próximos meses tendrán un repunte que a simple vista ofrecerá datos muy positivos para la actividad, pero el contraste debe contemplar que a partir del 19 de marzo de 2020 hubo un movimiento nulo debido a las medidas sanitarias adoptadas en el marco de la pandemia.
«De aquí en adelante cualquier circunstancia va a dar un aumento, las cifras van a ser mentirosas en las estadísticas por ser comparadas con tiempo en el que todo estuvo cerrado y en cero actividad. La realidad es que todavía los comercios pyme no han podido recuperar la performance que tenían antes de la pandemia», explicó Diab.
Desde Came detallan que las ventas en los comercios están en un 30 o 40 por ciento del volumen que traían antes de la pandemia, pero el dato que más alarma es la falta de expectativa de cara al futuro cercano. «Ya pasamos la primera de las fechas claves, con el inicio de clases. Había muchos que todavía tenían útiles del año anterior, que se sumó a la problemática general del consumo y se notó que no fue lo mismo que en los otros años», expuso el vicepresidente segundo de la entidad.
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«Ahora para Pascuas veremos cuáles son los resultados. También es una fecha icono para algunos sectores, fundamentalmente de alimentos. Igual al sector pyme le está costando remontar, sobre todo a los comercios y servicios, dado que no hay poder de consumo», acentuó.
El año anterior cerró, según Came, con un 22 por ciento de volumen de venta negativo. Eso contrasta con la leve mejoría que registra en la actividad del sector industrial pyme, donde han registrado una suba del 0,4 por ciento, principalmente impulsada por sectores fuertes como la maquinaria agrícola y la línea blanca. Aun así, ese repunte no se traslada a los comercios.
Al ser consultado por el posible regreso a un escenario de mayores restricciones a la circulación, Diab mostró preocupación: «Si estamos como estamos con esta flexibilidad, imaginemos lo que ocurrirá si tenemos que volver a cerrar. Igual eso no dependerá de nosotros. Sabemos que las autoridades no tienen interés en hacerlo, pero tal vez las circunstancias lleven a que se de así. Sería un mazazo más para aquellos que están tambaleando para no salirse del sistema».
Ante este escenario, el titular de la Asociación Empresaria de Rosario fue contundente: «Volver a cerrar sería letal para los comercios».
