Agustín Rossi, ministro de Defensa de la Nación, consideró que ayer hubo dos posiciones evidentes frente a la marcha convocada por los fiscales por el pedido de esclarecimiento de la muerte de Alberto Nisman. Una que busca rédito político y otra con “interés genuino” en conocer la verdad.

Aseguró que la marcha tuvo un claro tinte opositor aunque destacó que no se registraron insultos ni frases incómodas hacia la presidenta Cristina Kirchner.

En diálogo con Radio 2, el político rosarino realizó un análisis del llamado 18F. «Hubo dos componentes de ciudadanos, el que marchó para rendir homenaje al fiscal, por un reconocimiento póstumo a su trabajo y otro, opositor, con dirigentes políticos, grupos empresarios opositores, que contaron también con la adhesión de los medios que están contra el Gobierno», señaló.

En ese sentido, amplió: «A los que fueron motivados por interés genuino, queremos decirles que haciendo la salvedad de familiares directos y afectos de Nisman, no hay nadie más interesado que el Gobierno en que se sepan las circunstancias que rodearon la muerte del fiscal». Y agregó: «A los que intentan posicionarse políticamente y generar un desgaste al Gobierno le decimos que no está bien usar la muerte de Nisman en beneficio político, en beneficios electorales porque para las elecciones falta tiempo».

El ex legislador también advirtió que «no aparecieron con la misma intensidad las descalcificaciones groseras que se hicieron sobre la presidenta y el Gobierno en otras oportunidades».

Por otro lado y en declaraciones a LT8, Rossi señaló que «a los que intentan ahora, ayer y mañana para posicionarse políticamente y obtener un rédito electoral les decimos que las elecciones son en octubre, que habrá tiempo para el debate y los argentinos van a votar la propuesta que más les parezca», pero que «no está bien utilizar este hecho trágico para posicionarse políticamente». Y que «el gobierno tiene un contrato electoral que honrar y hasta el último día debe honrarlo».