El precio de la carne sigue siendo parte de una polémica por supuestos incrementos que sufriría el producto en las próximas semanas. Empresarios comentaron que la carne podría aumentar, mientras que otros desmintieron tales variaciones.

A raíz de la controversia, Conclusión conversó mano a mano con José García, titular de la Asociación de Carniceros de Rosario, quien detalló los problemas del sector y explicó las causas de los aumentos. Aunque determinó que los precios no suben desde la última semana de noviembre, en la que hubo un incremento de 25 o 27 por ciento “y a partir de ahí no ha habido modificaciones prácticamente”.

A su vez, García destacó que “nosotros como carniceros no hemos cambiado los valores”. El responsable del sindicato de carniceros esbozó que “lo que sí, hay un achicamiento de la oferta porque hay una pérdida de casi diez millones de cabezas por distintas circunstancias por  sequías e inundaciones. Y para el consumo en la Argentina eso se siente a veces. Fundamentalmente en las categorías más livianas, eso es lo que está faltando”.

En cuanto al rol del Estado en la regulación del sector: “Coincidimos que deberíamos ir hacia mayores kilos, que es la forma de aumentar la oferta. Es un proceso, son decisiones de políticas públicas donde tiene que haber incentivos que tienen que ver con la producción. Y debe haber premios a aquel que termina el proceso, a través de descuentos impositivos. Pero no vemos políticas para solventar este desequilibrio.

El más débil de la cadena

García definió al gremio de los carniceros como “el eslabón más débil de la cadena”. “Lo más fácil es echarle la culpa al más débil, siempre. A veces tenemos que escuchar que la culpa de los aumentos la tiene el carnicero sin saber cómo funciona la cadena, hay transporte, hay trabajadores, hay industria”, explicitó el titular de la Asociación de Carniceros.

“Los carniceros son el eslabón más débil porque tiene que ver con la escala que tenemos en las ventas. Hay pequeños lugares, que generalmente son familiares y ni hablemos de los aumentos de las tarifas, alquiler, servicios. La carne aumenta cuando aumenta la hacienda en pie”, manifestó García.

Por último, José García se mostró esperanzado en relación al futuro del sector. “Siempre soy optimista con respecto al futuro de la ganadería y del negocio nuestro porque el consumidor nos ha elegido. Con la llegada de los grandes supermercados, el 65 por ciento de la faena pasa por manos del carnicero y tenemos una relación día a día con el consumidor. Aunque reconoció que “el sector vive momentos difíciles”.

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