Este miércoles, a los 94 Años, falleció el histórico e incansable luchador por los derechos de los jubilados, Enrique Gigena, miembro de la Mesa Coordinadora Nacional de Organizaciones de Jubilados y Pensionados, Filial Rosario.

El grupo de jubilados y pensionados que se concentran los sábados en la esquina de las peatonales comunicaron del fallecimiento de su dirigente, además dijeron que no se realizará el velatorio y lo despedirán brevemente, el jueves 14 de abril a las 9.30, en el crematorio del Cementerio de Granadero Baigorria.

Enrique Gigena nació el 15 de Julio de 1927, en el barrio Ludueña, a una cuadra de los cruces de las vías de los ferrocarriles Mitre y Belgrano (Cabin 8) donde pasaba gran parte de su tiempo jugando a la pelota.

Por esas cosas del destino, cuando se le presentó la circunstancia de jugar en la Primera de Rosario Central, por el talento que ostentaba como marcador derecho, un tremendo pelotazo en uno de sus ojos anuló esa oportunidad paralizándolo por seis meses por el posible riesgo de desprendimiento de retina. 

Se graduó de tornero en una escuela técnica e ingresó a trabajar en una empresa metalúrgica y tiempo después en los talleres del Ferrocarril en Pérez.

Históricamente delegado gremial, Gigena era un apasionado por la política desde los 10 años, un líder nato interesado en los problemas sociales, en lo que derivó su paso por la Liga de los Derechos del Hombre y militancia en el Partido Comunista (PC).

Enrique, padre de dos hijos y abuelo de tres nietos, lideró la Mesa Coordinadora de Jubilados y Pensionados de Rosario y a sus 94 años continuó encabezando junto a su esposa una lucha que lleva más de 30 años, para exigir un ingreso digno y la recuperación del Instituto Nacional de Servicios Sociales para jubilados (INSSJ)- P.A.M.I. para que la Obra Social de los Jubilados esté en manos de quien corresponde y brinde a los jubilados y pensionados una atención de excelencia.

Sus hijos creían al principio que la lucha de su padre se trataba un hobby, pero cuando tuvieron la edad suficiente para entenderlo no solo recibió su apoyo y contención, sino también el apoyo de sus amigos.

En ese largo camino de lucha transitado, conoció a su segunda mujer, Olga, una militante jubilada, docente, que en las marchas lleva el megáfono e integra la Comisión Directiva y con quien pelea codo a codo. 

En la esquina de Córdoba y San Martín, icono de la perseverancia en la lucha que llevan adelante los jubilados, en forma independiente de los partidos políticos, el Concejo Municipal los reconoció y designó como “La Esquina de la Dignidad”. En el 2017, el mismo órgano legislativo lo declaró “Ciudadano Distinguido de Rosario”, acto que se realizó en la Asociación Empleados de Comercio.

A excepción del Movimiento de Madres de Plaza de Mayo, no hay movimientos que tengan una lucha tan prolongada como la de estos jubilados de la Mesa Coordinadora.

Como trabajador tiene registradas tres importantes luchas con fuerte compromiso, por la Paz, la Marcha desde Pérez, que al llegar a Rosario eran miles contras las guerras, también intervino como referente contra el cierre de los ferrocarriles y fue un protagonista Activo en el Rosariazo.     

Que las personas mayores de 70, 80 o 90 años estén transitando las calles del país en demanda del reconocimiento de sus derechos es su orgullo, y que lleven 30 años marchando con sus reclamos es una radiografía descarnada de la injusticia que padecen.

Ernesto Gigena, a sus 94 años, continuó participando en la coordinación de Jubilados y Pensionados de Rosario y a partir de su incorporación a la Mesa Coordinadora Nacional, desarrolló en Rosario todas las propuestas de los Congresos Ordinarios.     

Gigena decía “ante aquellos que le acreditan a la Mesa Coordinadora ser la vanguardia de esta lucha, respondo que eso se debe a la ausencia de los que deberían estar en primera fila”.

Él sostenía que, “mientras tenga fuerzas y haya incumplimientos existirá la lucha”.

El miércoles 13 de abril de 2022, el grupo de jubilados y pensionados continuó con la causa realizando un “semaforazo” en la tradicional esquina de Corrientes y San Luis, pleno centro de Rosario, reclamando por un aumento de sus haberes, el 82 % móvil, en decirle al gobierno basta de intervenciones de PAMI y saqueos en la Anses, y la creación del instituto de Previsión.

Pasado el mediodía recibieron la triste noticia de fallecimiento del máximo dirigente de la Mesa Coordinadora nacional de Jubilados y Pensionados.