El papa Francisco advirtió este lunes que «el riesgo de nuevas pandemias seguirá siendo una amenaza para el futuro» y llamó al mundo a atender las urgencias de «vacunas, aguas y pan cotidiano» de «todos los habitantes del planeta».

«El riesgo de nuevas pandemias seguirá siendo una amenaza también para el futuro», planteó el pontífice al reunirse en el Vaticano con miembros de la Pontificia Academia para la Vida de la Santa Sede, como parte de la Asamblea General de la institución.

En su discurso, Jorge Bergoglio convocó a los miembros del organismo vaticano a apoyar las «Iniciativas internacionales, como las recientemente promovidas por el G20, destinadas a crear una gobernanza global para la salud de todos los habitantes del planeta, es decir, un conjunto de reglas claras y acordadas internacionalmente, respetuosas de la dignidad humana».

Al repasar los desafíos del organismo para los próximos años, Francisco destacó las medidas tomadas a nivel mundial «para detener y derrotar a la Covid-19», pero pidió también «estar atentos a lo que significa ser vulnerable y vivir cotidianamente en la precariedad».

«De esta forma también podremos hacernos responsables de aquellas graves condiciones en las que viven otros y en las que hasta ahora tenemos poco o ningún interés», argumentó.

«Aprenderemos así a no proyectar nuestras prioridades sobre las poblaciones que viven en otros continentes, donde otras necesidades son más urgentes; donde, por ejemplo, faltan no solo vacunas, sino agua potable y el pan de cada día», convocó en ese marco.

«Bienvenido sea, entonces, el compromiso de una distribución equitativa y universal de las vacunas, pero teniendo en cuenta el campo más amplio en el que se requieren los mismos criterios de justicia, para las necesidades de salud y promoción de la vida», agregó.