Científicos argentinos que lograron eliminar el gen de la «vaca loca» planean en lo inmediato utilizar la tecnología de la «edición genética» para producir cerdos que puedan actuar como donantes de órganos a seres humanos.

Así lo reveló el director del estudio que pudo eliminar el gen de la enfermedad conocida como «vaca loca», el investigador del Conicet y de la FAUBA, la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Daniel Salamone.

El científico explicó que «hay muchas proteínas que tiene el cerdo que causan reacciones, pero pensamos que con la edición genética se podrá hacer compatible al cerdo con el humano».

«Es algo muy lento, que lleva tiempo, pero lo vamos a poder acelerar, lo importante de la noticia es la utilización de las tijeras genéticas que permiten eliminar cierta información genética», explicó Salamone.

El experto habló de una «evolución» con el reciente descubrimiento efectuado a través del Laboratorio de Biotecnología Animal, que logró eliminar el gen de la «vaca loca» en embriones a partir de estudios que se realizaron en colaboración con científicos de Alemania y Estados Unidos, el INTA de Castelar y la Universidad Maimónides a través de Sergio Ferraris.

En tanto, el logro representa un avance en el combate de una temida enfermedad que afecta a los bovinos y que se puede transmitir a humanos.

Pero, además, el trabajo permitió poner a punto en el país una nueva técnica de edición genética, denominada Crispr-Cas9 (tijera genética), que generará nuevos conocimientos en las áreas de la medicina humana y la producción animal.

«Hay un elemento infeccioso que produce la ´vaca loca´ que ataca una proteína y que el gen que se eliminó es esa proteína», expresó Salamone.

En la Argentina no hay «una urgencia de eliminar la enfermedad porque no existe, estamos pensando en producir medicamentos en humanos y animales y la gran preocupación es un medicamento que viene de una enfermedad y de una vaca».

Mientras que en la Argentina, según el científico, este medicamento sería atractivo para «otros países que son compradores porque tiene las chances cero de transmitir la enfermedad».

Por ejemplo a los animales superiores de cabaña argentinos se les podría introducir la resistencia (que es la eliminación de la proteína susceptible) para después propagar estas características beneficiosas incorporadas con las tijeras genéticas, en definitiva se producirían animales con una resistencia a la ´vaca loca´».

«Suele darse en la naturaleza que hay animales resistentes a una enfermedad, pero usualmente están en muy baja proporción y en general es poco útil para provocar rápidamente un cambio en la población», aclaró.

Por este motivo, el grupo de investigadores propone «una edición genética que es un sistema por el cual se pueden eliminar genes».

«Las vacas tienen la proteína que les da susceptibilidad, si uno elimina esa proteína no puede desarrollar la enfermedad y además se puede introducir información genética nueva. En nuestro caso dimos este trabajo como primera demostración de que podemos editar el genoma de una especie doméstica a nivel embrionario», dijo.

El logro representa un avance en el combate de una temida enfermedad que afecta a los bovinos y que se puede transmitir a humanos.

La investigación fue publicada en la edición de julio de la revista Theriogenology y su principal autora fue la especialista Romina Bevacqua también de la FAUBA que también es investigadora del Conicet.

Los estudios fueron financiados por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación.

La Argentina es un país libre de la enfermedad de la «vaca loca», pero Europa, Estados Unidos y otros países sufrieron grandes problemas.

«En el caso particular de la ‘vaca loca’, basta cambiar un aminoácido (el componente de la proteína que genera la enfermedad) para que ese animal tenga resistencia. Por eso creemos que estas modificaciones sutiles nos permitirán en un futuro reparar enfermedades genéticas u otorgar resistencias», manifestó finalmente Salamone.