Números alarmantes. El desempleo en la industria textil viene en aumento y Rosario no es la excepción, donde la desocupación en este sector alcanzó el 10,3 por ciento. El Gran Buenos Aires, Catamarca y Mar del Plata también alcanzan los dos dígitos en materia de desocupación. Además entre el año pasado y el primer trimestre de 2017, más de 50 mil trabajadores fueron suspendidos.

Así lo advirtió un informe de la Federación de Industrias Textiles Argentinas (Fita), entidad que alertó que la actividad atraviesa una «situación crítica», a raíz de una «caída en los niveles de producción, un consumo que no se recupera y un incremento sostenido de las importaciones».

En un informe, Fita recordó que el desempleo del primer trimestre de 2017, según los datos del Indec, ascendió a 9,2%, pero aclaró que, en la actividad textil, «se volvió a cifras de dos dígitos, hasta un 11,8% en el conurbano bonaerense, contra 11,2% (segundo trimestre de 2016); 10,6% (tercer trimestre 2016) y 9,4% (cuarto trimestre 2016)».

Otros ejemplos de desempleos de dos dígitos en la industria textil se registran en  Catamarca (10,8%), Mar del Plata (10,4%) y Rosario (10,3%), aseguró la entidad.

Asimismo, la entidad indicó que el sector observó un descenso en su nivel de actividad de 19,1%, en promedio, en el primer cuatrimestre de 2017.

También se deterioró el porcentaje de utilización de la capacidad instalada, que a abril pasado se situó en un 55%, muy por debajo del nivel general de la industria, de 65%, según FITA.

En tanto, la Federación señaló que las importaciones en los primeros cinco meses del año acumulan incrementos de 60% -en el caso de las prendas- y de 28% -en confecciones-.