Después de frustrarse el acuerdo de cese al fuego Kerry-Lavrov, Estados Unidos amenaza ahora con permitir el abastecimiento de misiles tierra-aire a los grupos terroristas, aunque no directamente desde Washington. Una consecuencia del último fracaso diplomático podría ser que los Estados del Golfo Arábigo o Turquía quizás ofrezcan el suministro de armas a las facciones rebeldes, entre ellos los sistemas de defensa aérea portátil (Manpads), dijeron funcionarios estadounidenses no identificados, según la agencia Reuters.

«Los saudíes siempre han pensado que la forma de lograr que los rusos retrocedan es lo que funcionó en Afganistán hace 30 años, es decir, negarles el espacio aéreo, dándoles Manpads a los muyahedínes», dijo un funcionario estadounidense.

«Hasta ahora, hemos podido convencerlos de que los riesgos de esto son mucho mayores hoy, porque no estamos enfrentados a una Unión Soviética en retirada sino a un líder ruso que está decidido a reconstruir el poderío ruso y que está menos propenso a recular», afirmó este funcionario, en referencia al presidente ruso Vladimir Putin.