Desde que salen del productor y hasta que llegan al consumidor, la precios de los productos agrícolas se multiplicaron por 4,9 veces promedio en septiembre, y mostraron una reducción de 9,9% en esa brecha frente a agosto, de acuerdo con un informe difundido hoy por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came).

Según ese trabajo, la mejora  se explica por la caída mensual «fuerte» que tuvo la brecha para el limón, la manzana, la pera y la zanahoria.

Los datos surgen del Índice de Precios en Origen y Destino (Ipod) que elabora Came para una canasta de 20 alimentos agrícolas, que se consumen en fresco en la mesa familiar.

La entidad explicó que la participación del productor en el valor de góndola subió levemente durante ese mes: para el promedio de los productos agrícolas y ganaderos relevados en septiembre, el productor recibió el 25,9% del precio que pagó el consumidor en góndola, con un incremento de 0,5 puntos porcentuales de participación frente a agosto.

De todos modos, indicó que los productos agrícolas con mayores brechas de precios en el mes fueron justamente los mismos que mostraron fuertes bajas: en primer lugar se ubicó la naranja, con una brecha de 10,8 veces, seguido por la pera con una brecha de 10,1 veces; la manzana con 8,4 veces, la mandarina (7,1 veces) y el limón (6,7 veces).

En cambio, los productos donde menos se multiplicaron los precios desde que salieron del campo y hasta que llegaron al consumidor (en septiembre) fueron: la calabaza con una brecha de 1,78 veces, la papa (2,61 veces), la frutilla (3,03 veces), la zanahoria (3,04 veces) y el zapallito (3,07 veces), detalló Came.

Asimismo, resaltó que de los 20 alimentos agrícolas que integran la canasta del Ipod relevados durante la segunda quincena de septiembre, en 10 aumentó el precio de origen, en 12 aumentó el precio destino, y en 12 mejoró la brecha entre el precio de origen y destino.

En ese sentido, señaló que hubo varios productos donde la caída en las brechas fueron significativas, especialmente porque ocurrió en aquellos que más diferencia suelen tener a lo largo del año, como son el limón, la manzana, y la pera.

Según el informe empresario, la tasa de variación promedio de los precios de origen fue de 14,1% en septiembre, mientras que los precios de destino subieron 2,1%, lo que explica por qué se redujo en el mes.

Para Came, las distorsiones de precios en la cadena frutihortícola mostraron una leve mejora en septiembre, cuando los precios recibidos por los productores mejoraron por encima de los incrementos que tuvieron en góndola.

En ese sentido, la entidad subrayó que la mejora más fuerte en los precios de origen se produjo en la calabaza, donde los precios al productor subieron 114,8%: los productores pasaron de recibir $ 9 el kilo en agosto a $ 19,3 en septiembre.

«De todos modos, parte de ese incremento se trasladó a los precios al consumidor, que aumentaron 54,9% en el mes (de $ 22,1 a $ 34,2)», aclaró.

Además, aseguró que un indicador que resume la distorsión que se produce en el precio durante el circuito logístico que tienen los productos agrícolas-ganaderos es la participación del productor en el precio final.

En septiembre, en promedio el productor recibió el 25,9% del valor pagado por el consumidor en góndola por el producto, con una ganancia de 0,5 puntos porcentuales frente a la participación obtenida en agosto (25,4%).

Los productos con menos participación del productor en el precio en septiembre fueron la naranja (9,3%), la pera (9,9%), y la manzana (11,9%), remarcó Came.

Por último, afirmó que mientras el Ipod que agrupa a 20 productos vegetales alcanzó una brecha de 4,92 puntos en septiembre, el Ipod que agrupa a 5 productos animales (huevo, carne de pollo, carne de novillito, leche y carne de cerdo) se ubicó en 4,07, mostrando un aumento de 13,4% en relación al valor alcanzado en agosto pasado.