Tras el veto al segundo proyecto de bloqueo inmigratorio para ciudadanos de países musulmanes, presentado luego de que el primero se topara con el freno de la Justicia y con igual destino, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump , parece no querer dar el brazo a torcer.

Convencido de que impedir el arribo de personas provenientes de naciones como Irán, Siria, Sudán, Somalia, Libia y Yemen reducirá el riesgo de ataques terrorista en el país, la administración republicana anunció hoy la prohibición de computadoras portátiles y tabletas en la cabina de los vuelos de nueve compañías aéreas procedentes de ocho países de Medio Oriente.

Compañías como Emirates o Turkish Airlines, que operan vuelos directos desde Dubai o Estambul hacia Estados Unidos, tienen 96 horas (cuatro días) para prohibir a sus pasajeros que embarquen con aparatos electrónicos mayores a un teléfono celular.

Todos esos dispositivos (computadores portátiles, tabletas, consolas, libros electrónicos, lectores de DVD, cámaras de fotos) deberán incluirse en el equipaje facturado de los aviones, indicaron responsables estadounidenses.

«Basándose en estas informaciones», el secretario para la Seguridad Interior, John Kelly, «decidió que era necesario reforzar los procedimientos de seguridad para los pasajeros con salida directa de algunos aeropuertos y con destino Estados Unidos», agregó otro responsable.

En total, se verán afectados medio centenar de vuelos diarios de nueve aerolíneas (Royal Jordanian, EgyptAir, Turkish Airlines, Saudi Airlines, Kuwait Airways, Royal Air Maroc, Qatar Airways, Emirates y Etihad Airways) con salida de diez aeropuertos internacionales: Amán, El Cairo, Estambul, Yeda, Riad, Kuwait, Doha, Dubái, Abu Dabi y Casablanca.

Con esta resolución, ocho países se ven afectados, todos ellos aliados o socios de Estados Unidos: Jordania, Egipto, Turquía , Arabia Saudita, Kuwait, Qatar, Emiratos Árabes Unidos y Marruecos .

«Consideramos que es lo que hay que hacer y en los lugares adecuados para garantizar la seguridad de los viajeros», justificó un alto responsable oficial, quien hizo alusión a «varios incidentes y atentados coronados con éxito contra pasajeros y aeropuertos estos últimos años».

Los responsables no dieron ningún plazo para la prohibición en cabina de los dispositivos electrónicos, pero advirtieron que si no se ponen en marcha las medidas, las aerolíneas podrían perder su derecho de volar a Estados Unidos.