Ucrania acusó hoy a Rusia ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) por «apoyar el terrorismo», financiar a las milicias pro rusas que actúan en el este del país, y de ser la responsable del derribo del avión de Malaysian Airlines MH17 en julio de 2014, en el que fallecieron 298 personas.

«Ucrania ha venido a esta corte para defender los derechos humanos de su pueblo», los cuales «han sido violados por uno de los miembros fijos del Consejo de Seguridad de la ONU», argumentó ante los jueces la vicecanciller de Ucrania, Olena Zerkal, según informó la agencia EFE.

Su delegación denunció que Moscú violó dos acuerdos internacionales: la Convención por la supresión de la financiación del terrorismo, firmada en 1999, y la Convención internacional por la eliminación de todas las formas de discriminación racial, de 1965.

Respecto al primero, Kiev sostiene que Moscú apoya con armamento y financiación a las milicias pro rusas que operan en el este del país y citó varios ataques sufridos por la población civil, como el bombardeo de áreas residenciales en Mariupol o en Avdeyevka.

Uno de los ataques a civiles que nombró fue el derribo del avión de Malaysian Airlines MH17 en el este de Ucrania en julio de 2014, en el cual murieron las 298 personas que estaban a bordo y que fue calificado por Harold Hongju, representante de Ucrania, como un «un ataque contra la humanidad».

Cheek presentó fotografías y vídeos para demostrar la responsabilidad de Moscú en la tragedia. Según la secuencia de esos documentos, la lanzadera con la que se derribó el avión fue trasladada desde Rusia a territorio ucraniano un día antes del suceso con cuatro misiles. Sin embargo, cuando dicho armamento volvió a su lugar de origen y cruzó la frontera, contaba con un misil menos.

«Si no se toman medidas, no se podrá evitar que esto pueda volver a ocurrir mañana», advirtió Cheek, quien solicitó a los jueces que exijan a Rusia «ejercer un control apropiado de su frontera y dejar de financiar actos de terrorismo».