Ante la crisis habitacional que sufre la ciudad patagónica, donde cada vez más inmuebles son destinados al turismo y salen del mercado para inquilinos locales, el intendente Walter Cortés propuso que la Municipalidad entregue terrenos con facilidades de pagos. Además, el municipio trabaja con empresarios para lanzar un programa similar al PreViaje durante los meses de abril, mayo y junio.
El alquiler de un monoambiente en Rosario rondó los $100.000, mientras que la renta de un inmueble de un dormitorio se aproximó a $130.000 y la de una propiedad con tres ambientes, a los $175.000.
Alquilar un monoambiente en Rosario durante octubre implicó un gasto de $89.000, mientras que la renta de un departamento de dos ambientes rondó los $110.000 y uno de tres habitaciones promedió los $150.000. Las alzas mensuales fueron del 14,7%, 10,6% y 7,1%, respectivamente.
En busca de dar respuesta a la crisis, el Gobierno portugués plantea la implementación de un paquete de medidas que incluye el alquiler forzoso de casas vacías desde hace dos años y la imposición de un límite para casas que ya están en el mercado.
Organismos como la Concejalía Popular e Inquilinos Agrupados, a través de Nire Roldán, Ariel D'Orazio y Sebastián Artola, indicaron que la Ley de Alquileres logró poner un tope a los aumentos desmedidos de la renta. Por este motivo, rechazan las modificaciones a la legislación que impulsa Juntos por el Cambio -que apunta a que los contratos duren dos años y las actualizaciones sean trimestrales o semestrales-, las cuales entienden que están al servicio del mercado inmobiliario.
Entre 2018 y 2023 las viviendas ociosas pasaron de ser 118.000 a 200.000. Mientras tanto, cada vez hay menor cantidad de inmuebles para alquilar, mientras que las rentas se disparan año a año.
El alquiler de un monoambiente en Rosario durante junio requirió, en promedio, $62.100: para afrontar este costo, un jubilado que percibe la mínima destinó el 88% de sus ingresos, mientras que un trabajador con el salario mínimo invirtió el 71% de su sueldo.
El dato se desprende de un informe del INDEC, que además advirtió que el 4,8% de las personas habita en una vivienda cercana a basurales, mientras que otro 7,7% lo hace en un casa localizada en zonas inundables.
En Rosario sólo hay 900 inmuebles en alquiler, contra 59.000 que están en venta. La falta de oferta, junto a una demanda sostenida, provocó que la renta de departamentos monambientes o de dos habitaciones suba más del 150% en el último año.
La falta de oferta y la alta demanda de viviendas para alquilar, sumado a la acelerada inflación que se registra en el país, llevaron a que las inmobiliarias especulen con un aumento del 60% en las rentas durante este año.
Con más de la mitad de los votos escrutados, el referendo celebrado ayer registró un 57% a favor de la expropiación a las grandes empresas inmobiliarias de cientos de miles de viviendas vacías. Un 38% votó en contra, según los datos oficiales.
Un reclamo que vuelve a cobrar fuerza y amenaza con recrudecerse. Enfermedades, hacinamiento y políticas públicas conforman el marco de discusión con el Estado. “Insistimos en que se debe respetar la autodeterminación de nuestros pueblos, tienen que decidir junto a nosotros, no por nosotros”, le dijo a Conclusión Luis Báez, referente Mocoví.