Desde la empresa advierten que esta situación podría generar retrasos en la atención de reclamos específicos del servicio.
El servicio eléctrico para usuarios residenciales tendrá una suba del 9% a partir de noviembre, mientras que para jubilados y beneficiarios de la tarifa social el aumento será del 4%, y para grandes usuarios -como comercios e industrias- del 7%.
El proyecto además busca que se proceda administrativamente con el trámite de calcular e imputar como pago a cuenta o crédito fiscal en favor de aquellos contribuyentes a los cuales se les haya facturado ese costo financiero.
La empresa estimó que el consumo irregular de energía equivale a un fraude económico del orden de los 5.235.000 pesos.
De acuerdo a un informe del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz, los sectores más afectados serán los de mayor consumo, sobre todo en tarifas No Residenciales de Pequeñas Demandas, industriales y comerciales, y los de las Grandes Demandas.
Las autoridades de la empresa explicaron que las tareas forman parte de un plan "prioritario" de "disminución de las pérdidas no técnicas" para "mejorar la facturación e los consumos y la calidad del servicio".
Entre las propuestas que elevaron durante el encuentro se destaca la implementación de un sistema de tarifas especiales para las personas que alquilan.
Desde la empresa aclararon que el cuadro tarifario no se modificaba desde marzo de 2019, e informaron que el ajuste implica un incremento promedio del 4%.
Desde la empresa explican que el desafasaje está vinculado al incremento de los costos de los materiales, equipamientos y servicios, que fueron muy significativos desde mediados de 2019. Igualmente aclararon que los futuros aumentos se aplicarán con una segmentación que reduzca las inequidades.
Entre los establecimientos en falta se ubican tres supermercados ubicados en la zona sureste de Rosario, una vinoteca de calle Urquiza y un café de Pellegrini, los cuales habrían tenido un consumo eléctrico equivalente a $770.000, aplicando la tarifa comercial.
Desde el sector piden que la empresa "proceda a re-facturar los períodos de marzo a julio dentro del plazo de 15 días". Quieren que no les cobren "los componentes adicionales que incluye la facturación y no tienen que ver con lo consumido".
La línea gratuita y exclusiva -que será dada de alta mañana- permitirá informar cualquier inconveniente técnico en el servicio que presta la Empresa Provincial de la Energía (EPE).