La Internacional Progresista advirtió por un posible golpe de Estado encabezado por el propio presidente de ese país, Jair Bolsonaro. Estiman que es posible que suspenda las elecciones programadas para 2022.
Un grupo de militares del país africano arrestó hoy al mandatario Alpha Condé, para luego disolver el gobierno y el Congreso, suspender la vigencia de la Carta Magna y dictar toque de queda "hasta nuevo aviso", en un hecho que fue celebrado en vastas zonas del país y condenado "enérgicamente" por la ONU.
La revelación está contenida en un documento de la Secretaría de la Defensa Nacional publicado en último libro del presidente Andrés Manuel López Obrador. El dato se conoce a más de un año y medio de lo ocurrido.
La expresidenta de facto Jeanine Áñez (2019-2020) podría recibir la pena máxima por delitos de lesa humanidad cometidos en el marco del golpe de Estado que derrocó al mandatario Evo Morales.
Así lo confirmó hoy el presidente de la Comisión Bicameral de Inteligencia del Congreso, Leopoldo Moreau, quien aseguró que "hay un fuerte indicio de que ha habido una participación previa (de agentes) al Golpe de Estado" en la actuación de "tareas preparatorias".
El ex presidente de Bolivia denunció que “la CIA contrató la inteligencia argentina para el golpe de Estado” cometido contra su gobierno en 2019 y sostuvo que los embajadores de Brasil y de la Unión Europea también participaron de la maniobra antidemocrática.
El dictamen fue presentado al juez en lo penal económico Javier López Biscayart y pide investigar también al exministro de Defensa, Oscar Aguad.
Tanto ministros del gobierno nacional como el ex camarista Eduardo Freiler, presentaron cargos judiciales contra Mauricio Macri y funcionarios de su gobierno, a quienes acusan de enviar armas a Bolivia para apoyar el golpe de Estado ocurrido en ese país en 2019.
En una carta que publicó en sus redes sociales, el ex presidente Mauricio Macri desmintió “de manera rotunda” haber enviado armas y material bélico a Bolivia para apoyar el golpe de Estado cometido en ese país durante 2019 y sostuvo que estas acusaciones buscan “desviar la atención del fracaso económico” del actual gobierno argentino.
Varios miembros del Gobierno de facto que siguió al golpe y fue liderado por Jeanine Áñez -hoy detenida por la misma causa- se fugaron del país y buscaron refugio en el exterior para evitar ser arrestados por la Justicia boliviana en los últimos meses.
Los analistas critican el hecho al considerarlo un “espectáculo únicamente motivado por razones políticas”. La ex dirigente sólo fue autorizada a reunirse con su equipo jurídico en dos ocasiones. Y cada encuentro tuvo que durar menos de media hora.
El diplomático argentino en Bolivia expuso que como no se dieron las condiciones que existieron en Brasil, Paraguay o Argentina, “dieron un golpe tradicional”, yendo “por el camino que nunca había dejado de utilizar la derecha en Latinoamérica en los últimos 40 años”.