Francisco expresó su "cercanía" con la ciudadanía de Turquía luego del atentado de ayer que dejó 37 muertos en Ankara. Envió "bendiciones de paz, curación y la fuerza sobre la nación".
Una fuerte explosión sacudió hoy el corazón de Ankara, en lo que varios medios locales ya califican como un atentado, y provocó al menos 34 muertos y 125 heridos, el gobierno turco culpó a la milicia extremista Estado Islámico.
El Comité Internacional de la organización manifestó su preocupación por la situación humanitaria que se vive en la provincia siria con los enfrentamientos entre el ejército y las milicias.
“Turquía no dudará en utilizar en cualquier momento, en cualquier lugar y en cualquier ocasión su derecho a defenderse”, ha asegurado en un comunicado el presidente Erdogan.
Tropas de Siria, respaldadas por las milicias del Hezbolá y el poderío aéreo de Rusia, están a menos de 25 kilómetros de la frontera con Turquía, al norte de Aleppo, luego de haber tomado la villa de Kiffen. Esta es la primera vez desde el 2013 que el gobierno sirio ha estado tan cerca de esa frontera.
Miles de civiles sirios que huyen de la ofensiva lanzada hace una semana por las tropas del ejército de Damasco en Alepo (norte) esperan la apertura de la frontera para recibir ayuda.
Son miles los refugiados que se encuentran a la intemperie esperando poder ingresar al país vecino luego de haber sido obligados a dejar sus hogares ante el avance del ejército.
Según señala Acnur, al menos 366 personas murieron en el Mediterráneo o fueron declaradas como desaparecidas en lo que va de año.
El jefe de la Agencia Europea de Fronteras, Fabrice Leggeri estimó que serán un millón los que entrarán en territorio europeo y advirtió que los esfuerzos realizados por Ankara para frenar estos flujos son insuficientes.
Ocurrió en un centro turístico de Estambul y además de las personas fallecidas hay otros 15 heridos. En círculos del gobierno se habla ya de un posible atentado terrorista o de un atentado suicida.
Entre ellos fallecieron niños y una mujer embarazada. Ocurrió en el mar Egeo cerca de Turquía después que dos embarcaciones naufragaran antes de llegar a la costa, según medios periodísticos.