El presidente turco se reunirá el martes con su homólogo ruso después de reprochar a los "amigos" occidentales la falta de apoyo tras la intentona golpista del 15 de julio.
Los detenidos se enfrentan a dos acusaciones: ser miembro de una organización terrorista y conspirar para derrocar el Gobierno, explicó el abogado Elkan Albayrak.
Denunció hoy la ONG turca Kaos GL, que trabaja en favor de los derechos de la comunidad LGBT.
Los cambios en la cúpula militar permitirán tanto al presidente como al primer ministro puedan dar directamente órdenes a los comandantes de las fuerzas. También habrá cambios fuertes en los servicios de inteligencia.
Bajo la consigna “Contra el golpe de estado y por la democracia”, más de 40.000 personas apoyaron al presidente turco luego del fallido golpe de Estado. En el país gobernado por Angela Merkel viven más de un millón y medio de turcos.
El ministro del Interior Efkan Ala anunció el viernes nuevas cifras mostrando la magnitud de esa "gran limpia" tras la noche del levantamiento del 15 de julio, que se saldó con 270 muertos.
Por medio de diversas especulaciones se ha intentado dar una explicación a los sucesos que mantuvieron en vilo a la política del viejo mundo, descartar distintas hipótesis resultaría temerario.
Según un decreto publicado este sábado en el diario oficial, las detenciones de los sospechosos de estar implicados en el golpe de Estado frustrado podrán durar hasta 30 días.
Cinco días después del golpe fallido, unas 55.000 personas, principalmente policías y docentes, fueron suspendidos o despedidos, según un recuento de la AFP a partir de cifras oficiales.
Fue el pedido del presidente ruso al tiempo que solicitó mantener la seguridad de los turistas. Ambos mandatarios expresaron nuevamente su voluntad de reunirse próximamente.
Tras el intento de golpe de Estado en Turquía, el presidente electo, Recep Tayyip Erdogan, apuntó a Fethullah Gulen como el principal impulsor del levantamiento militar y lo acusó de ser el líder de una organización terrorista.
En distintos encuentros con el presidente, Barack Obama, Erdogan le reclamó por la extradición de Gulen, quien actualmente vive en Pensilvania, para que fuera juzgado en Turquía por supuestas conspiraciones contra su país.