Por Hernán Cabrera

El origen de los helados es muy antiguo. Algunos sostienen que los antiguos romanos son los inventores del «sorbete», para lo cual utilizaban nieve, frutas y miel. Cuentan que el emperador Nerón hacia traer nieve de los Alpes para que le preparasen esta bebida helada.
Otros, en cambio, señalan que los chinos, muchos siglos antes de Jesucristo, ya mezclaban la nieve de las montañas con miel y frutas. En la corte de Alejandro Magno, se enterraban en la nieve ánforas conteniendo frutas mezcladas con miel para conservarlas mejor y se servían heladas.
En el año 1660, el italiano Procopio inventó una máquina que homogeneizaba las frutas, el azúcar y el hielo, con lo que se obtenía una verdadera crema helada, similar a la que hoy conocemos. Procopio, abrió en París el «Café Procope», donde además de café se servían helados y así se popularizó. Durante muchos años los heladeros italianos guardaron celosamente el secreto de preparación de los helados, aunque como vendedores ambulantes lo difundieron por toda Europa. Para el siglo XVIII, las recetas de helados empezaron a incluirse en los libros de cocina.
En nuestro país, hasta mediados del siglo 19, el hielo llegaba desde Inglaterra o los Estados Unidos en barras envueltas en aserrín. Los primeros en servir refrescos ‘helados’ fueron el «Café de París», el «Café de las Armas» y el «Café de los Catalanes». Gradualmente aparecieron las heladerías.
En esta ocasión vamos a preparar un helado bien argentino: de dulce de leche

Ingredientes para 3-4 porciones:

  • 500 gramos de dulce de leche (que no sea repostero)
  • 250 gramos de crema de leche
  • 250 ml. de leche

Preparación:

Mezclar de a poco en un bol el dulce de leche con la crema de leche. La crema tiene que estar líquida, sin batir. Batir hasta unir bien.
Agregar la leche (llená el pote de crema que  quedó vacío, de leche) e integrar bien. Llevar el bol al freezer por 2-3 horas. Cuando tome consistencia, desintegrarlo y batirlo bien de nuevo. Llevar otra vez al freezer.

Esta operación repetirla un par de veces para que quede bien cremoso. Para hacer las variantes que vemos en las heladerias se le puede poner chocolate picado, nueces, almendras.