Convocada por el Ministerio de Trabajo, la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares buscará consumar este jueves la paritaria 2022-2023.
Por ello, el Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares (Sitracp) se movilizará en el contexto ofrecido por la reunión para pedir un salario básico de 110 mil pesos, además de la jubilación anticipada por tareas insalubres y el fin de la precarización laboral.
Tal cifra está basada en datos establecidos por el Indec para que una familia no sea pobre, por lo que desde el Sitracp dijeron: “Estamos por debajo de la línea de la pobreza y en condiciones de desprotección laboral que, en estos tiempos, es insostenible».
Las trabajadoras del sector recibieron un 15 % a cuenta, por lo que esa comisión deberá decidir el criterio con el que redondearán la negociación salarial.
Algunos calculan que si se aplican los criterios llevados a cabo en los últimos acuerdos, el porcentaje a otorgar rondaría el 55 %, lo que conformaría una suba anual del 79 %.
Otras opciones que se estudian describen un acuerdo hasta noviembre, fecha en que volverá a reunirse el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, que está directamente asociado a la variable de la actividad del personal doméstico.
Un cálculo realizado por IProfesional establece un paralelismo. “Hoy, el salario inicial de la actividad está, en el caso del personal con retiro, en $362,50 por hora y $44.517,50 por mes. Y personal sin retiro: $390,50 por hora y $49.503 mensuales. En tanto, el Salario Mínimo, Vital y Móvil pasó de $47.850 a $51.200 en septiembre; $54.550 en octubre y $57.900 en noviembre. Es decir, tres aumentos del 7% cada uno. Y está prevista una nueva reunión para noviembre, con el fin de acordar los incrementos, por lo menos, hasta marzo del 2023.
Otra opción es la de realizar aumentos por tramos hasta noviembre lo que llevaría los ingresos a aproximadamente 60 mil pesos y la hora a unos 450 pesos.
En tal sentido, fuentes gremiales consideraron: “Lógicamente que los aumentos serán en cuotas; lo ideal es que no sean más de cuatro y, cualquiera sea el porcentaje del primer mes, debe ser retroactivo al 1 de agosto, porque venimos con un atraso salarial considerable, sin contar lo que venimos perdiendo en los últimos cinco años y el tiempo de pandemia, donde muchas trabajadoras no recuperaron el empleo».
