Los ediles que integran la comisión de Seguridad del Concejo Municipal trasladarán al ministerio de Seguridad de Santa Fe, a través de un encuentro con el ministro Maximiliano Pullaro, reclamos recurrentes de vecinos de distintas zonas de la ciudad.
La seguridad continúa siendo una de las principales preocupaciones de los rosarinos y un tema central de la agenda política.
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En ese tenor, viene realizándose regularmente un Observatorio organizado por la comisión que preside Gabriel Chumpitaz, en el que los vecinos de cada distrito plantean sus inquietudes y proponen alternativas para mejorar la convivencia en los barrios, en algunos casos traumáticas.
Por citar un caso, esta semana vecinos de la zona de Casiano Casas y Sorrento salieron en dos ocasiones para reclamar mayor presencia policial, debido a los constantes episodios delictivos que aseguran venir sufriendo.
Otro ejemplo cercano es el reclamo del club Argentino de Rosario, cuyos dirigentes se acercaron semanas atrás para pedir alguna respuesta ante la comisión por reiterados hurtos que pusieron en jaque a la institución.
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La recesión económica, según estimaciones públicas y privadas, estaría entrando en su fase más dura, con lo cual el escenario de deterioro social para los próximos meses podría agravarse, lo cual siempre trae aparejado un aumento en los niveles de inseguridad.
Con ese marco, dentro de las próximas dos semanas (la fecha estimada es el sábado 17 de noviembre), los siete concejales que integran la comisión de Seguridad, acompañados por representantes de cada barrio elegidos por los vecinos, se encontrarán con el ministro Pullaro para trasladar los reclamos y evaluar alternativas en conjunto.
“Son reuniones que habíamos programado con Pullaro cuando nos reunimos la última vez en OJO, y después de haber hecho varios observatorios en barrios, en distintos distritos. La idea es acercar a los vecinos al ministerio, van seleccionar representantes de ellos, alrededor de 30 vecinos”, precisó a Conclusión el edil del PRO Gabriel Chumpitaz, presidente de la comisión.
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Entre los reclamos más repetidos por los asistentes al Observatorio, Chumpitaz enumeró: mayor presencia policial y de Gendarmería, control de motos, y, respecto a la municipalidad, video-vigilancia y cuidado del entorno: poda y escamonda, iluminacion, frecuencia de colectivos.
“Hemos hecho proyectos desde la comisión a partir de las reuniones, reclamando a la intendencia y obviamente está bueno que se traslade al ministerio”, precisó el concejal de Cambiemos.
Ciudad emergente
Por estos días se discute en el Palacio Vasallo volver a declarar la emergencia en Seguridad, como ocurriera en 2016 tras de dos multitudinarias marchas en reclamo por la escalada violenta que cosechó más de 180 muertes ese año.
Se aprobó entonces un paquete de medidas (28 en total) por 180 días, luego prorrogadas por otros seis meses, entre otras cosas para que el municipio pudiese disponer más discrecionalmente de partidas relativas a la problemática.
Más allá de que la ciudad es azuzada por otros fenómenos que influyen en la situación social de los barrios, como son ineludiblemente el narcotráfico y sus derivaciones, no parece ser casual que sea otra vez cuando la economía atraviesa una profunda recesión el momento en el cual se discute en términos de crisis.
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Esto echa definitivamente por tierra la supuesta dicotomía entre el deterioro económico y los hechos delictivos (suelen ir, por el contrario, aparejadas), como por momentos pareció plantearse durante el debate en el órgano legislativo local que derivó en la declaración de la emergencia social y alimentaria semanas atrás, en medio de una sesión por lo menos tensa.
“Estamos revisando los 28 proyectos que se aprobaron en la emergencia anterior, revisando la versión taquigráfica de aquella sesión y discutiendo para llegar a un consenso y llevarlo adelante. También viendo qué proyecto el municipio cumplió y en qué medida”, detalló Chumpitaz.
Visitas y mensajes
También en ocasión de la anterior declaración, en 2016, comenzó a aceitarse lo que hoy parece ser la fluida relación interpares de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, con su par santafesino, Maximiliano Pullaro.
Bullrich visitó la ciudad dos veces en el último mes, siempre escoltada por Pullaro y referentes locales de Pro, como los concejales López Molina y Chumpitaz, o el diputado provincial (¿y precandidato a gobernador?) Federico Angelini.
“Cuando fuimos con la ministra a barrio Grandoli los vecinos la alentaban, y agradecían por el envío de fuerzas federales, Gendarmería, se está trabajando fuertísimo, que venga tantas veces la ministra a la ciudad es todo un mensaje: Nación está poniendo foco en Santa Fe y Rosario. Es una tarea conjunta, se está trabajando bien”, dijo Chumpitaz a Conclusión respecto una de las últimas visitas de la ministra.
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En rigor de esta “tarea conjunta”, varios señalan a Pullaro como “el que se siente más cómodo” con Cambiemos dentro del Frente Progresista. Por ahora nadie parece dudar de la permanencia de una de las principales referencias del grupo radical NEO en el oficialismo provincial, que también fue reconocido por los vecinos del Barrio municipal en aquella caminata.
En cuanto a Bullrich, más allá del repudio que despierta en algunos sectores, también parece cómoda mostrándose en Rosario, una de las zonas más inseguras del país, como la cara de “la política del orden”, ante un reclamo evidente de la ciudadanía que muchas veces se sobreinterpreta a partir de la antinomia conservadurismo/progresismo, en ésta y otras latitudes.
La ministra, que comanda una de las áreas que algunos señalan como clave de cara a los comicios de 2019 en un país cuya economía no repuntará hasta nuevo aviso, pregunta en sus eventuales recorridas por los barrios de la ciudad si “¿conocen a Roy?”, que en general la acompaña como el candidato natural del PRO para intendente de una ciudad con índices delictivos como los de Rosario.
“La sociedad reclama que se cumpla la ley. Quiere vivir tranquila, y es obligación de quienes representan, de quienes tienen que administrar justicia y a quien le toca comandar el sistema de seguridad, brindarla. Es complejo y sencillo al mismo tiempo. Llevarlo adelante no es nada fácil, por eso se trabaja fuerte”, consideró el edil macrista Chumpitaz.
