Luego de tres años de severas sequías en el noreste de Argentina, el Paraná redujo significativamente sus niveles. Actualmente, el corredor fluvial presenta, en Rosario, una altura de 2,28 metros, muy por debajo de las marcas normales que el río debería tener en esta época del año. Sin embargo, el panorama es alentador para las próximas semanas, ya que se prevé que el nivel supere los tres metros.

Según el Instituto Nacional del Agua (INA), al 28 de febrero el Paraná presenta, en Rosario, una altura de 2,28 metros, mientras que lo normal para esta época son 3,5 metros.En tanto, el límite de aguas bajas es de 2,4 metros, lo que quiere decir que actualmente el río se encuentra en niveles mínimos.

Sin embargo, el pronóstico para los próximos días es alentador: para el martes 7 de marzo, se prevé que el río llegue a un nivel promedio de 2,7 metros, con una altura mínima de 2,35 y una máxima de 3,05 metros.

Para el 14 de marzo, en tanto, el nivel promedio rondaría los 3,12 metros. El pico podría ser de 3,45 metros, y el mínimo de 2,75, superando así el límite de aguas bajas.

Fuente: Instituto Nacional del Agua (INA).

La situación se repite en varias localidades santafesinas: en Reconquista –ciudad ubicada al norte de la provincia de Santa Fe– el río está actualmente en 3,88 metros, bastante cerca de los 3,92 promedio que suele tener en esta época del año. Al contrario de Rosario, en esta localidad el Paraná se encuentra lejos del nivel límite de aguas bajas, que es de 2,3 metros. Para las próximas semanas, se espera que el río llegue a los 4,5 y 4,44 metros, respectivamente.

En la ciudad de Santa Fe, en tanto, el Paraná tiene actualmente una altura de 2,86 metros, mientras que lo normal para la época es de 3,82 metros. Aquí también se supera el límite de aguas bajas, que es de 2,6 metros. Para las próximas semanas se espera que la altura del río ronde los 3,42 y los 3,93 metros.

A pesar del pronóstico alentador, el INA advirtió: “Si bien las condiciones son en general mejores que las observadas en los últimos tres años, la perspectiva climática aún no permite definir un límite temporal del escenario de aguas bajas iniciado en marzo de 2020”.

Crece el río, y se desprenden los camalotes

Ante el aumento en el caudal del río Paraná, es frecuente que se desprendan camalotes, y que ramas y troncos sean arrastrados por las corrientes y permanezcan semisumergidos en el agua. Ante esta posibilidad, se recomienda a los navegantes de embarcaciones menores que presten especial atención y circulen con precaución.

Asimismo, la Prefectura Naval Argentina indicó que con el aumento en los niveles del río cambió la configuración de los fondos y costas. Así, muchos bancos quedaron cubiertos por las aguas.

En este sentido, recomendaron no navegar de noche, ya que “el riesgo de accidentes se incremente peligrosamente”.