El presidente Alberto Fernández consideró que el año que viene será «un buen año» para la Argentina y remarcó la necesidad de trabajar para «sacar a personas de la pobreza» y «generar empleo».

«El año que viene creo que va a ser un buen año, debemos trabajar para sacar a las personas de la pobreza, generar empleo», sostuvo Fernández en diálogo con Radio 10.

Más adelante, el primer mandatario aseguró que le gustaría tener al economista Roberto Lavagna en su Gobierno porque «es una persona calificada», pero aclaró que el ex ministro «no quiere volver a la función pública».

«Me gustaría tenerlo a Roberto Lavagna en el Gobierno, pero el no quiere volver a la función publica, es un hombre muy calificado», consideró el primer mandatario.

Además, Fernández remarcó que diciembre «fue un mes de relajamiento» frente al coronavirus y eso generó que el virus circulara «con mayor rapidez».

«Tenemos la sensación que diciembre fue un mes de relajamiento, hubieron marchas y situaciones que hicieron que el virus circule con mayor rapidez», subrayó el jefe de Estado y aclaró que «si el relajamiento sigue», se va a «ver la manera en la que las fuerzas policiales puedan actuar para disipar las reuniones y demás».

Asimismo,  efectuó la convocatoria para enero próximo del Consejo Económico Social, que será encabezado por el secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Gustavo Beliz.

En el marco del balance de fin de año aseguró que «gobernar en pandemia es lo mas cercano a caminar en un pantano» porque «nunca se sabe lo que va a pasar» y destacó que este año se llegó a un acuerdo con los acreedores externos.

«Gobernar en pandemia es lo mas cercano a caminar en un pantano, nunca se sabe lo que va a pasar, porque muy poco se sabe del virus», sostuvo Fernández en declaraciones a Radio 10.

El mandatario manifestó que el Estado debió reinventarse «frente a la pandemia», a la vez que indicó: «Por eso incorporamos el IFE, el ATP, y el impuesto a la riqueza. Nos preocupaba los sectores más pobres, yo personalmente no quería que quedaran desamparados, por eso sacamos la tarjeta alimentaria».

«Incluso hemos tenido aprendizajes a lo largo de este año. Cuando se desataron los contagios en los barrios, creíamos que era el fin, pero fuimos testeando y les pedimos que se cuidaran entre ellos», señaló Fernández.

No obstante, aseguró que analiza la posibilidad de instruir a las fuerzas de seguridad para que se disipen las aglomeraciones de personas como prevención ante el incremento de casos de coronavirus, pero descartó la implementación de un “toque de queda”.

“No vamos a implementar un toque de queda pero sí un toque sanitario que fue algo que funcionó en muchas ciudades del interior”, describió.

Por otra parte, el Presidente destacó además todo lo que «se logró» mientras se llegaba «a un acuerdo con los acreedores».

«Yo no miento, no está en mi naturaleza. Les prometí a los jubilados que no iban a pagar los medicamentos y lo cumplí. Les prometí a los argentinos la vacunación a fin de año y lo cumplí», subrayó.

Además, Fernández realizó un balance de lo que fue su primer año de Gobierno: «Estoy muy tranquilo con mi conciencia, siento que hicimos todo lo que estuvo a nuestro alcance. Creo que tomamos siempre el camino correcto».

De todos modos, aclaró: «Fue un año muy difícil, nadie sabe lo que he vivido yo ni mis ministros, enfrentamos una pandemia que nos dio vuelta todo».