La próxima boleta de luz llegará con un aumento para los habitantes de la provincia de Santa Fe: a partir de noviembre, comienza a regir un aumento del 9% para los usuarios residenciales del servicio eléctrico, el cual cerrará el año con una suba del 31%.
Este será el último aumento anual en las tarifas de la Empresa Provincial de la Energía (EPE). Cabe recordar que, tras la autorización del gobierno provincial, el servicio eléctrico ya aumentó un 14% en mayo pasado y un 8% en julio, porcentajes a los que se suma el 9% de noviembre.
En tanto, para los jubilados y quienes son beneficiarios de tarifas sociales, la boleta de luz llegará en noviembre con un 4% de aumento. De esta forma, la suba anual para estos sectores -que ya tuvieron un incremento del 6% en mayo y del 4% en julio- será del 14%.
Por otro lado, las tarifas para las grandes demandas aumentarán un 7% en noviembre. Si se tienen en cuenta las subas del 11% en mayo y del 7% en julio pasado, el incremento anual para estos usuarios será del 25%.
Mientras que la EPE no prevé más aumentos en lo que queda del 2021, la suba de todas sus tarifas -tanto para residenciales como para industrias y comercios- no superó a la inflación acumulada en lo que va del año, que en septiembre ya alcanzaba el 37%.
En el monto de la factura de luz inciden fuertemente los precios mayoristas que define el Gobierno Nacional y el Valor Agregado de Distribución (VAD), que en este caso fue definido por la EPE y autorizado por el Gobierno de Santa Fe.
A fines de abril, el Ministerio de Infraestructura, Servicios Públicos y Hábitat, a través de la Resolución 306/2021, autorizó la actualización de los cuadros tarifarios solicitados por la EPE, incluyendo porcentajes máximos que se aplicaron en forma desdoblada.
Con esta medida, se pretendió disminuir el impacto en el bolsillo de los santafesinos y atender la realidad socioeconómica actual, según expresaron desde el Gobierno provincial.
