POR ELISA SOLDANO

La Canasta Básica Alimentaria (CBA) de un rosarino subió en enero –con respecto a diciembre– un 18,4%. De esta forma, un adulto que reside en la ciudad necesitó en el primer mes del año al menos $91.314 para satisfacer sus necesidades alimentarias y no caer en la indigencia, según un relevamiento realizado por la Usina de Datos de la Universidad Nacional de Rosario (UNR).

En el informe, se consideran los precios de cincuenta y ocho productos que componen la CBA, los cuales fueron ofrecidos en góndolas rosarinas. Cabe destacar que este relevamiento no incluye a los servicios públicos ni a los productos no alimenticios, por lo que el costo de la Canasta Básica Total (CBT), que determina la línea de pobreza, fue aún mayor.

“Entre enero de 2023 y 2024, la Canasta Básica Alimentaria aumentó todos los meses, siendo el mayor incremento el de diciembre del año pasado”, destacó al informe, al tiempo que indicó que, al comparar las cifras del primer mes de este año con enero del año pasado, la variable tuvo un incremento del 388,9%.

Si bien la CBA viene registrando aumentos en el último año, las subas abruptas comenzaron en agosto, cuando la variable creció un 25,8% con respecto a julio, producto de la devaluación originada por el gobierno de Alberto Fernández. Tras registrar subas del 18,9% en septiembre y del 19% en noviembre, el segundo pico se produjo en diciembre, cuando la Canasta Alimentaria aumentó 34%. Este incremento está explicado, en buena medida, por la devaluación y la desregulación económica que impulsó Javier Milei en su primer mes de mandato.

Ente diciembre y enero, la CBA en Rosario subió unos $14.195; mientras que en la comparación interanual el alza es de $72.638‬, ya que en enero del año pasado se necesitaban $18.676 para no caer en la indigencia.

Los rubros que registraron mayores aumentos de precios en términos porcentuales fueron el “Pan” (105,6%), los “Cereales y derivados” (63,7%) y los “Condimentos” (49,8%).

En tanto, los mayores aumentos registrados en términos absolutos durante enero fueron el “Pan” ($9.635), los “Cereales y derivados” ($2.976), las “Frutas” ($1.282) y las “Bebidas y jugos” ($1.044).

Enero, con una inflación galopante

El ministro de Economía, Luis Caputo, estimó que la inflación de enero se ubicará en torno al 20%. A pesar de que habría un descenso en comparación al 25% de diciembre, las cifras continúan siendo altas. No obstante, el funcionario adelantó que los números de febrero podrían ubicarse “por debajo del 20%”.

Si bien el índice oficial será difundida el 14 de febrero por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), las consultoras dieron estimaciones similares a las de Caputo.

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En este sentido, EcoGo proyectó para enero una inflación del 18,6%, mientras que Orlando Ferreres aguarda un número parecido, 18%. Por su parte, la Fundación Fiel estimó un 21%.

En el primer Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) que dio a conocer el Banco Central el martes, quienes participaron de esa encuesta estimaron una inflación mensual de 21,9% para enero. Para febrero proyectaron una inflación mensual de 18% y para el año de 227%.

¿Cómo impactó la suba de al CBA en los hogares?

La Usina de Datos de la UNR considera tres tipos de hogares: el primero está conformado por cuatro miembros, dos adultos y dos adolescentes, y necesitó en enero $347.906 para satisfacer sus necesidades alimentarias básicas. En diciembre se requerían $293.822 y en noviembre $219.338.

El segundo hogar está compuesto por dos mujeres adultas y una menor y necesitó en el primer mes del año $190.846 para cubrir la Canasta Básica Alimentaria (CBA). En diciembre se necesitaban $161.178 y en noviembre, $120.319.

Por último, una familia compuesta por cuatro integrantes, una mujer de 35 años y tres hijos de 12, 9 y 6 años, necesitó en enero ingresos por $269.376 para adquirir los alimentos básicos para su subsistencia. En diciembre requirió $227.500 y en noviembre, $169.829.

El poder adquisitivo, por el piso

El informe de la Usina de Datos advirtió: “Durante enero la Jubilación Mínima, la Pensión Universal para el Adulto Mayor y Salario Mínimo Vital y Móvil no aumentaron, lo que representa una disminución en términos de CBAs de 15,5%. Por otro lado, la Asignación Universal por Hijo aumentó un 60%, lo que representa un aumento en términos de CBAs de 35,1%”.

En enero, la jubilación mínima fue de $105.713 –sin contar el bono– y alcanzó a cubrir 1,2 Canastas Básicas Alimentarias. En tanto, el salario mínimo fue de $156.000 y saldó 1,7 CBA.

La Pensión Universal para Adultos Mayores (PUAM) fue de $84.570 y cubrió 0,9 CBA; mientras que la Asignación Universal por Hijo (AUH) fue de $33.058 y saldó 0,4 CBA, es decir que sólo alcanzó a cubrir las necesidades alimentarias de un niño de un año.