La inversión aumentó 4,5% durante septiembre y, así, se posicionó en el 20,4% del PBI, según indicó un estudio privado, y aclaró que hay un estancamiento ya que desde 2011 no hay «mejoras significativas».

De acuerdo con datos brindados por el Centro de Estudios Económicos Orlando Ferreres & Asociados, la inversión cerró el trimestre con un alza del 4,5% interanual.

Señaló que, en línea con el deterioro que observaron los principales indicadores macroeconómicos del país en los últimos años, la inversión real «se encuentra estancada hace ya cinco años y no muestra mejoras significativas desde la primera mitad de 2011».

El volumen invertido en septiembre fue de US$ 8.665 millones, medido al tipo de cambio oficial, por lo cual acumuló un total de US$ 69.113 millones en el año.

En el sector de la construcción los datos arrojaron que durante el noveno mes del año, la inversión avanzó un 4% anual y, así, alcanzó un alza de 4,8% durante el tercer trimestre en la comparación interanual.

Sin embargo, los datos desestacionalizados mostraron que la evolución de la inversión en ese segmento fue negativa entre julio y septiembre a causa de que hubo una merma de 0,4% respecto del segundo trimestre.

En el segmento de maquinaria y equipo, durante el mes pasado, la inversión en equipo durable de producción exhibió un incremento de 5,6% en términos interanuales, y acumuló en el año un aumento de 2,4% anual.

«Pese a que este resultado marca uno de los mejores rendimientos del año para este segmento, debe destacarse que el impulso provino de las importaciones de bienes de capital, que avanzaron 20% interanual, producto de la adquisición de automotores para vías férreas, coches de viajeros y locomotoras que el gobierno compró a China», evaluó el análisis.

Por otro lado, durante el mes pasado la inversión en bienes de capital de origen nacional cedió 8,3% anual.

El centro de estudios recomendó, en ese escenario, «modificar la tendencia de cara al futuro y lograr encaminar a la economía hacia un sendero de crecimiento sostenido».

«Deberán abordarse rápidamente los principales desbalances macroeconómicos para acotar la incertidumbre en el corto plazo, a la vez que se deberá buscar un marco institucional más sólido que garantice de manera más confiable los derechos de propiedad», sugirió.