El Gobierno volverá a reunirse hoy con los referentes de la CGT y de las cámaras empresariales para dar seguimiento a la Mesa del Diálogo por la Producción y el Trabajo, en medio de la polémica por el planteo del presidente Mauricio Macri de rediscutir y modernizar los convenios colectivos de trabajo.
El encuentro se realizará por la tarde en la Casa Rosada, luego de que el 19 de octubre pasado se pusiera en marcha este espacio tripartito y se sellara el acuerdo por un bono, no obligatorio, de 2.000 pesos para trabajadores del sector privado, lo que derivó en la suspensión de un paro nacional sin fecha que tenía previsto la CGT.
Ahora, esta segunda reunión tiene previsto abordar temas más de mediano plazo, como la proyección de la obra pública que estima el Ejecutivo para los próximos años, algo clave tanto para gremialistas como empresarios, y la posibilidad de cerrar un compromiso de los hombres de negocios para que no haya despidos por los próximos tres meses que demanda la central obrera.
No obstante, en las últimas horas el presidente Mauricio Macri metió la cola con su fuerte reclamo de «renovación» en la dirigencia sindical y al marcar la necesidad de rever los convenios colectivos de trabajo para ajustarlos «al siglo XXI».
Pese a las críticas que generaron esos dichos en el gremialismo y sectores de la oposición, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, ratificó este martes la postura del Gobierno: «No hay duda de que el mercado laboral está cambiando; hemos planteado en la Mesa de Diálogo que debemos pensar el mercado laboral de los próximos 20 años», afirmó.
«Las tensiones de los cambios tecnológicos que se están acelerando nos obligan a sentarnos y discutir lo que está bien, en defensa del derecho a trabajar, que es el corazón de nuestro sistema laboral», explicó Peña en declaraciones en Casa de Gobierno.
Y agregó que «debe haber un debate, un diagnóstico, preguntase que falló, que política hay que aplicar para mejorar» y analizar temas como «las bajas de las cargas laborales, la capacitación; preguntarse qué nos vamos a encontrar en 10 o 20 años y trabajar todos juntos».
El lunes, Macri había pedido «una renovación interna sindical» al aludir a «los dirigentes» que «conducen gremios desde hace 20 o 30 años», e instó a «analizar y discutir todos los convenios laborales» para «generar empleo».
Por su parte, el diputado del Frente Renovador e integrante del Consejo Directivo de la CGT, Facundo Moyano, salió al cruce de Macri y consideró que sus palabras tienen que ver con una «concepción de que la flexibilización laboral es el camino».
«No me sorprenden las palabras de Macri porque hay una concepción de que la flexibilización laboral es el camino. Él dice que el problema son los salarios. Lo que me sorprende es que lo diga ya que hemos sido demasiado prudentes», consideró el hijo del exlíder de la CGT, Hugo Moyano, en declaraciones a Canal 26.
Al respecto, el secretario general del gremio de Peajes le recordó al jefe de Estado que «hay un 40% de inflación» y que «el sindicalismo ha sido prudente y responsable».
Sobre esto, el jefe del sindicato de Judiciales, Julio Piumato, dijo que «fueron muy inoportunas las declaraciones del Presidente porque es como que mostró la hilacha».
«Pónganle límites a los que se llevan la plata afuera, a los empresarios a la usura, no a los trabajadores… limiten a los Ceos, a los empresarios. Son los afiliados los que delimitan las reglas de su organización, el Estado no se puede meter», advirtió el sindicalista en declaraciones al canal América 24.
E insistió: «Macri tiene primero que cumplir sus promesas electorales como pobreza cero y no meterle la mano en el bolsillo a los trabajadores (por el Impuesto a las Ganacias)».
Por su parte, el jefe del bloque de Diputados del Frente Para la Victoria, Héctor Recalde, advirtió que «no hay mejor instrumento que el convenio colectivo de trabajo y lo quieren desarmar» y alertó: «Vamos a volver al infierno».
