Los aumentos en tarifas de servicios públicos sigue siendo el tema del que habla la ciudadanía. Hoy, los que tomaron la palabra fueron tres de los funcionarios más importantes del Gobierno nacional: la vicepresidenta Gabriela Michetti y los ministros Juan José Aranguren (Energía) y Guillermo Dietrich (Transporte).

La vicepresidenta Gabriela Michetti aseguró hoy que los aumentos tarifarios tienen que ver con la realidad de haber recibido un «Estado desbarrancado» en sus cuentas públicas, «sin ninguna posibilidad de seguir sustentando los subsidios» de esa manera.

«Esta vez son varios los aumentos, y tienen que ver con una realidad súper especial que es la de un Estado que ha desbarrancado en sus cuentas públicas, que no tiene ninguna posibilidad de seguir sustentando los subsidios de esta manera», dijo Michetti, a cargo del Poder Ejecutivo por el viaje del presidente Mauricio Macri a Washington, en declaraciones formuladas a radio Mitre.

Agregó que con los aumentos anunciados «se está apenas equiparando» con otros países de la región, y señaló que la «demagogia y el populismo» de los últimos años llevó al país a un «nivel» alto de «atraso y locura».

Michetti reconoció que estos aumentos son «medidas antipáticas», que «no son para salir a festejar», pero que tienen que ver con «cuidar al Estado» y que «se haga cargo de lo que se tiene que hacer cargo». «Aquellas cosas que no correspondan al Estado, las tiene que pagar el ciudadano», consignó la vicerpresidenta.

Michetti también consideró que a los políticos populistas «no les importó nada empobrecer al país» y que lo que hicieron fue dar a la sociedad «una golosina, un calmante, un placebo», pero que en algún momento había que comenzar «a poner» todo «en caja».

«Pongamos sobre la mesa que lo que estamos haciendo es pagar un costo, pero le vamos a dar a la gente mayor bienestar a futuro», consignó la vicepresidenta.

Por su parte, el ministro de Energía, Juan José Aranguren, justificó hoy el tarifazo en las facturas de gas, por entender que estaban «bajas» a raíz de «las políticas que se aplicaron» durante el kirchnerismo.

«Las políticas que se aplicaron en la década pasada nos llevaron a la readecuación tarifaria», enfatizó Aranguren. «Debido a que la tarifa ha sido baja, ha aumentado la demanda y hoy no la podemos satisfacer con producción local», sostuvo el funcionario, al defender el ajuste de 300% promedio en las facturas del gas, que comenzó a regir desde este viernes.

En declaraciones radiales, Aranguren señaló que la Argentina «necesita una readecuación de tarifas para transformar los recursos en reservas y posteriormente en producción».

A su criterio, «a pesar de que tenemos recursos energéticos en el país, tanto fósiles como renovables, en el caso específico de los fósiles estamos dependiendo de la importación para hacer frente a la demanda energética».

El aumento en las tarifas del gas natural, que involucra a todo el país y alcanza también al GNC, el monto de reducción en subsidios del Estado nacional al consumo y producción de fluido es de 4 mil millones de dólares para este año, con respecto a 2015, según las estimaciones oficiales.

Por otra parte, Aranguren analizó la designación del ex ministro de Planificación Federal Julio De Vido como presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados. «Va a ser muy interesante que seamos convocados por la comisión para hacer referencia a las medidas que tomamos y la herencia que recibimos. Entonces, no lo veo como un problema sino como una oportunidad», señaló. Y añadió: «La Argentina necesita recuperar el diálogo, el debate. Va a ser muy interesante ver qué se va a proponer desde esa Comisión. Y que nosotros podamos explicar nuestra visión».

En tanto, el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, justificó hoy la suba de tarifas del transporte, por entender que «en términos de plata, no es tanto».

«La situación hace que los porcentajes sean terribles, pero en plata no es tanto», dijo sobre los ajustes del 100% promedio en los boletos de trenes y colectivos del área metropolitana de Buenos Aires, que comenzarán a regir el viernes próximo.

En declaraciones radiales, Dietrich criticó al Gobierno anterior, al señalar que «el populismo es acostumbrarse a tener cosas gratis, con mucha inequidad dentro del país».

Para el ministro, el incremento tarifario permitirá «encontrarle sustentabilidad al sistema», porque «hacia dos años que los boletos del tren y colectivo no se tocaban». No obstante, reconoció que «a la gente le impacta» la suba de tarifas y aclaró que pese a las subas, todavía «en muchos de los casos no se cubren los costos».

Además, recordó que «se mantendrán y aumentarán los subsidios» al transporte, que estimó en 65 mil millones de pesos anuales.

Dentro de una semana, la tarifa mínima del colectivo costará $6, cuando en la actualidad tiene un valor de 3 pesos; la tarifa social será de 2,70 pesos. En el caso del servicio ferroviario, pasará a valer entre $2 y $4, según el ramal.