Arden las discusiones laborales en Argentina, sobre todo en esta etapa del año, cuando está por concluir el segundo semestre y la economía no logra salir a flote. El presidente Mauricio Macri reclamó hoy una “renovación gremial” y advirtió sobre la necesidad de volver a “discutir todos los convenios laborales”, en el marco de la mesa de diálogo y cuidar la generación de empleo.
“Necesitamos que los sindicatos se renueven”, afirmó el jefe de Estado, quien además sostuvo que “tal vez hay que pensar si los mismos dirigentes que han conducido los gremios en los últimos 20 ó 30 años se están dando cuenta de esa necesidad”.
En este contexto, Conclusión consultó a los principales dirigentes sindicales de la ciudad. La mayoría coincidió en que en el trasfondo de la cuestión está la receta de flexibilización y precarización laboral que busca el Gobierno ante la impotencia por solucionarles los problemas a los trabajadores.
En primer turno, el titular de la Bancaria Rosario Matías Layús, señaló que “el tema de la renovación sindical que plantea Macri, tiene que ver con la impotencia que tiene para resolver los problemas de la gente. Gran parte de los gremios están en contra de su gestión y esto lo impulsa a plantear estas cuestiones que corresponden a un plan premeditado de influir sobre la desacreditación del pedido gremial”.
Sobre el reclamo del jefe de Estado hacia aquellos dirigentes que están hace “20 ó 30 años al frente de su gremio”, Layús consideró que “ésa es una discusión que nos debemos dar puertas adentro; habrá que reformar los estatutos con los cuales se rigen. Pero habría que ver si piensa lo mismo de quienes dirigen las entidades gremiales empresarias”.
“Su pedido simboliza la receta flexibilizadora: esto ya lo vivimos, primero realizan el ajuste y después vienen a emprolijar las relaciones laborales con precarización”, terminó el titular de la Bancaria, en concordancia con Juan Nucci, del sindicato de Judiciales de Rosario, quien sostuvo: “Todo lo que plantea Macri en términos de renovación sindical o modificación de convenios, son parte de un eje central que es la precarización laboral”.
“El planteo del gobierno desde que asumió es asimilar los costos laborales, básicamente el salario pero también las condiciones de trabajo, para una supuesta competencia con el sudeste asiático u otros países de América latina que tiene condiciones paupérrimas con relación a los trabajadores”, culminó Nucci.
En la misma línea, Antonio Donello, secretario general de la UOM Rosario, consideró que “la renovación sindical la tenemos, nosotros somos elegidos cada cuatro años. Y en mi caso, cada dos como delegado. Nuestros afiliados son los que nos dan el apoyo y el voto”.
Sobre la crítica al largo tiempo de mandato de algunos dirigentes, Donello se preguntó irónicamente: “¿Él cuánto lleva como político? ¿Carrió cuánto lleva como legisladora? Y así puedo nombrar a millones. Si la gente lo elige, hay que respetar, estamos en un país democrático”.
Con esta movida, según Donello, “Macri quiere apretar para que no se conozca la verdad. La verdad es que cada vez los gremios tenemos menos compañeros de trabajo, más gente en la calle. Yo creo que el presidente no debe meterse en la discusión sindical. En todo caso, si las bases están disconformes, son ellas las que habrán de cambiarlo”.
Por último, Martín Lucero, titular de Sadop Rosario, expresó a este diario que “lo primero que debería hacer Macri es respetar a los sindicatos como instituciones democráticas. El presidente tiene una debilidad por entrometerse en las organizaciones de la sociedad civil. Un día son los clubes de fútbol, otro día los sindicatos y vaya a saber que será en el futuro».
«Lo que a Macri le preocupa no son los dirigentes sindicales, son los reclamos de los trabajadores: por eso pide discutir todos los convenios colectivos de nuevo. Ya se ha quejado de la justicia laboral porque defiende a los trabajadores. Lo que espera de la nueva discusión de convenios es la flexibilización laboral”, agregó el gremialista.
Con la misma contundencia, Lucero concluyó diciendo que “es por eso que detrás del cuestionamiento a los dirigentes gremiales, lo que hay es un rechazo a sus reclamos. No extraña que el presidente critique a los sindicalistas, todos sabemos de su preferencia por los CEOs”.
Macri llamó a la renovación sindical y a rediscutir los convenios laborales
