La Confederación General del Trabajo (CGT) francesa junto a diversos sindicatos organizaron hoy una primera jornada de huelgas y manifestaciones contra la reforma laboral por decreto del presidente francés, Emmanuel Macron, que a primera hora de la mañana tenía incidencia sobre todo en algunos transportes públicos.

La CGT, la Unión Nacional de Sindicatos Autónomos (UNSA), los sindicatos Solidarios Unitarios Democráticos (SUD) y la organización estudiantil UNEF convocaron estas protestas contra los planes de Macron para flexibilizar el mercado laboral, que su gobierno debe aprobar el próximo 22 para una aplicación inmediata.

Los paros, que no se esperaba que afectaran de forma apreciable al sector privado, se centraron en la Administración, en la energía y, con mayor vigor, en el transporte público, muy particularmente en los ferrocarriles.

Además de la huelga, la CGT iba a evaluar su capacidad de movilización en las cerca de 200 manifestaciones previstas por toda Francia, la principal esta tarde en París, en la que participará su secretario general, Philippe Martínez, verdadero líder de la protesta.

Martínez justificó hoy su convocatoria en una entrevista al canal France 2 en la que denunció la actitud de Macron que, a su juicio, «divide a los ciudadanos», y señaló que el decreto ley que el Ejecutivo adoptará la semana próxima «es peor» que la reforma laboral del anterior presidente, el socialista François Hollande.

En lo referente al impacto en el transporte público, la compañía ferroviaria francesa SNCF garantizó el funcionamiento de la totalidad de sus trenes de alta velocidad (TGV), incluidos los Thalys a Bélgica y Holanda, los Eurostar a Londres o las líneas con España, pero no funcionarán entre el 10 y el 50 por ciento de los trenes de largo recorrido convencionales, «según los destinos», así como algunos trenes regionales, y algunos de los de tres de las líneas de cercanías de París.

En el área metropolitana de París el transporte urbano era esta mañana casi normal, pero había problemas en otras ciudades como Lyon, Marsella, Montpellier o Niza, consignó la agencia de noticias EFE.

En la capital francesa, no obstante, la circulación estaba bloqueada en la plaza de la Bastilla y en la avenida de los Campos Elíseos por una protesta paralela organizada por los feriantes.

Respecto del transporte aéreo, la Dirección General de la Aviación Civil (DGAC) anticipó que «a priori» la huelga iba a tener «poco seguimiento entre los controladores», y afirmó que las compañías que suspendan vuelos lo harán por su propia iniciativa.

De hecho, la aerolínea de bajo costo Ryanair anunció la anulación de 110 vuelos, mientras que Air France no tenía intención de hacer cancelaciones, aunque admitió que podrían registrarse retrasos.

La reforma laboral que impulsa el presidente Macron con la meta anunciada de crear empleo y atraer inversiones, fija topes en las indemnizaciones por despido y da prioridad a los acuerdos dentro de cada empresa por sobre el convenio colectivo de cada actividad, entre otros puntos que rechazan los gremios.