El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo de US$200 millones para la Argentina a fin de asegurar "un ingreso mínimo para más de dos millones de personas afectadas por el impacto de la pandemia, anunció hoy el organismo.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, sostuvo que "esta política pública, que busca mejorar la calidad nutricional, comenzó antes de la pandemia, pero frente a esta segunda ola de contagios adquiere una importancia vital". Fue destacada por la Organización de las Naciones Unidas.
La presidenta del Consejo Nacional de Coordinación de Políticas Sociales (CNCPS), Victoria Tolosa Paz, recorrió la planta de producción de alimentos, que estiman se pondrá en funciones en agosto, junto al rector Franco Bartolacci. La reducción de desperdicios de comida y la prioridad a los niños son los objetivos planteados.
El encuentro será a partir de las 11.30 por videoconferencia para establecer las bases del trabajo de todo el año.
En todo el país, la cifra asciende a 603.200 credenciales, que alcanzaron a aproximadamente un millón de niños.
Según el Ministerio de Desarrollo Social, para fin de febrero estará cubierto el 70 por ciento del país, un total de 1.400.000 tarjetas "que aportarán unos 70 mil millones de pesos anuales al consumo".
En la provincia que gobierna Juan Schiaretti se distribuirán 117 mil tarjetas, que alcanzarán a 217 mil destinatarios, que recibirán 588 millones de pesos para el consumo de alimentos en forma mensual.
El ministro de Desarrollo Social, Danilo Capitani junto al gobernador Omar Perotti firmaron el acuerdo con el ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo para la implementación de esta iniciativa en el marco del Plan Nacional Integral, "Argentina contra el hambre".
El ex senador nacional criticó hoy la puesta en marcha del plan "Argentina contra el Hambre" del Gobierno nacional y expuso sus dudas respecto a que "un vale de comida pueda generar una reactivación económica".
Según anunció el Gobierno, la distribución de tarjetas alimentarias comenzará a partir de la semana del 20 de enero.
El ministro repasó la experiencia en Concordia, la ciudad entrerriana con el índice más alto de pobreza relativa según las mediciones del Indec, donde la entrega de tarjetas alimentarias apunta a cubrir las necesidades de 10.000 personas.