A partir de la reforma a la ley de impuesto interno operada en la época del macrismo, todas las pymes del sector debieron acudir a la Justicia para poder funcionar, ya que el esquema de impuesto mínimo establecido no podía ser soportado: las obligaba a salir al mercado al mismo precio que los monopolios.
Desde la empresa denuncian que no que “no están viendo que es una de las mayores contribuyentes de la provincia de Santa Fe y tampoco les importa la cantidad de trabajo directo e indirecto que genera”.
Desde la empresa rosarina señalaron que la multinacional Massalin pidió en mayo pasado la suspensión de un tributo que por otro lado solicitaba que sea pagado por pequeñas y medianas empresas locales del sector.
La planta ubicada en la calle Ingeniero Sánchez Granel 3424, en barrio Nuevo Alberdi produce 2700 cajas diarias de cigarrillos. La firma Bronway compite en el mercado con un producto accesible y de calidad, pero un conflicto judicial que acarrea desde hace meses pone en riesgo más de 200 puestos de trabajos directos y más de 1500 de manera indirecta, encargados de la distribución.
Después de que la Justicia federal de Rosario resolviera una medida cautelar en diciembre, desde la entidad oficial “lo único que han hecho fue dilatar la cuestión”. Los empleados temen por su continuidad laboral debido al posible cierre de la empresa.
La justicia redujo un monto que debía pagar la empresa, por lo tanto, esta semana se presume que vuelva a ponerse en marcha la compañía. Unos 200 trabajadores se veían afectados de forma directa, y cerca de 3.500, de manera indirecta.
En el marco de una movilización realizada este lunes por la mañana, un trabajador de la empresa Bronway señaló que la cifra de trabajadores afectados en forma indirecta estaría en el orden de los 6.000. El apoderado denunció que “las empresas beneficiadas en este caso son la Philip Morris y la British American Tobacco".