Las fuentes de seguridad dijeron que se discute un alto a los combates durante 40 días en la primera fase, acompañado del intercambio de 40 rehenes israelíes, incluidos ancianos y civiles, por 400 prisioneros palestinos.
El líder de Hamás, Ismail Haniyeh, reveló haber mantenido una conversación telefónica con el secretario de la Yihad Islámica Palestina, Ziad Nakhaleh, como parte de las negociaciones para un alto al fuego.
La solicitud fue anunciada por el alto cargo de Hamas, Taher al Nunu, quien destacó que se trata de un cese total y no de una tregua temporal.
Los enfrentamientos se intensificaron en los últimos días en la región de Darfur, especialmente en Darfur Sur, donde fuentes locales confirmaron el sábado que al menos 120 personas habían fallecido desde el repunte de la violencia el pasado miércoles.
Residentes dijeron que habían sido despertados por el sonido de disparos de artillería y de ráfagas de tiros y expresaron su aflicción ante la renovación de los enfrentamientos, en los que los bandos usan armas pesadas en zonas densamente pobladas.
Residentes de la capital confirmaron el estallido de enfrentamientos en el oeste de Jartum, así como en el sur de Omdurman, a la que se llega cruzando un puente.
El enfrentamiento entre el Ejército, bajo el mando del general Abdel Fatah al Burhan, y los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) del general Mohamed Hamdan Daglo, causó desde el 15 de abril unas 700 muertes.
El sindicato de médicos del país detalló que hay "numerosos heridos y víctimas mortales por los choques no han sido incluidos en este recuento y no han podido llegar a los hospitales por la dificultad del traslado y la situación de seguridad en el país",
El Jartum, la capital sudanesa, de 5 millones de habitantes, ya no se escuchaban ráfagas, disparos ni explosiones casi por primera vez desde el inicio de los combates, el 15 de abril. Los enfrentamientos han dejado hasta ahora 427 muertos y más de 3.700 heridos, según la ONU.
Debido a los combates, muchas familias han quedado atrapadas, con poco o ningún acceso a electricidad, agua, alimentos y medicinas. El país tiene una de las tasas de desnutrición infantil más altas del mundo con más de 600.000 niños con desnutrición aguda grave antes de los enfrentamientos.
Los trabajadores humanitarios de la ONU señalaron este miércoles que los residentes también enfrentan situaciones que se van generando a causa del riesgo de colapso en el sistema de salud.
Las tropas rusas siguen llegando en oleadas a lo largo de la línea del frente en el este de Ucrania, dijeron soldados ucranianos el martes, una señal de que no hay tregua en la ofensiva invernal rusa.