El jefe de la organización operaba y elegía a las potenciales víctimas desde la cárcel. Un compañero del pabellón 11 de Unidad Nº6 de Rosario era quien hacía los llamados telefónicos, mientras que el tercer integrante retiraba el dinero y otros objetos de valor.
Tras recibir un llamado de alguien que decía ser su hijo y que avisaba que personal bancario pasaría a recoger el dinero, la víctima entregó entre 30.000 y 40.000 dólares a un hombre que conducía un camión blindado y se hizo presente en su domicilio.
La estafa ocurrió en la localidad de Esperanza y la víctima fue un hombre que fue engañado por otro que se hizo pasar por un familiar. Tras un largo periplo por varias localidades lograron capturar a los involucrados.
Las jóvenes eran buscadas por estafas cometidas en Santa Fe, Córdoba, Entre Ríos y Corrientes. Fueron apresadas tras dos allanamientos realizados en Roldán y en Barrio Luis Agote, en Rosario.
La víctima recibió un llamado en el que le informaban que había ganado un voucher del supermercado Coto que constaba de un premio en efectivo. Para acceder al mismo, le indicaron una serie de operaciones en un cajero automático que le bloquearon la cuenta. Cuando pudo volver a acceder, le habían quitado 73.000 pesos y 150 dólares.
Ocurrió en Soldini. Una mujer recibió un llamado en el que le explicaban que se había hecho acreedora de una suma de 400.000 pesos y le indicaron que se dirija al cajero para concretar la operación. Sin embargo, una vez allí, terminó transfiriendo 110.000 pesos.
Un hombre la llamó por teléfono, se hizo pasar por su hijo y le dijo que tenía que cambiar el dinero antes que perdiera valor. La víctima entregó todos sus ahorros a una persona que llevaba un uniforme de Prosegur, la conocida empresa de seguridad.
El acusado participaba de una asociación ilícita que estafaba a personas bajo la modalidad “Cuento del tío”.
Una modalidad criminal que se extiende. Esta vez ocurrió en Puerto General San Martín. La víctima recibió un llamado de una supuesta vecina que le indicó que le entregara todo su dinero y joyas al gerente del Banco Macro, que se lo iba a retirar en su domicilio.
Tenían su base de operaciones en dos cabañas ubicadas en el barrio Tierra de sueños 3, en Roldán. Desde allí, realizaban entre 300 y 500 llamadas por día hasta dar con alguien que caía en la trampa y accedía a entregar sus ahorros.
Los operativos se llevaron adelante en el complejo de cabañas de Calle Leloir 2.400 del barrio Privado Tierra de Sueños, donde se secuestraron celulares, dinero en efectivo, dólares y oro. Por el caso hay ocho personas detenidas.
Ante la ola de esta nueva modalidad, desde el Ministerio Público de la Acusación acercan recomendaciones para alertar a la población sobre como advertir un llamado con fines delictivos.