Voceros del municipio santafesino indicaron que entre el domingo y el martes hubo 15 personas heridas por el ataque de esos peces, en su mayoría niños y en ningún caso de gravedad.
El estudio fue realizado por la Universidad Nacional del Litoral a pedido del gobierno de la provincia de Santa Fe para una obra de envergadura que favorecerá a 250.000 habitantes, 7.000 industrias y comercios y 1.600 instituciones.
El fin de semana largo estuvo marcado por el ataque de palometas que, atraídas por el calor y por la bajante de la laguna Setúbal, atacaron a una treintena de personas. La lesión más grave la sufrió una adolescente de 13 años, a quien le amputaron un dedo del pie.
Eran buscados desde este lunes, cuando intentaron cruzar el lecho a pie debido a la bajante.
El cuerpo presenta graves heridas de arma blanca en la cabeza, manos, pecho y además tiene signos de tortura. Tenía más de 60 años y la familia había denunciado su desaparición el pasado 27 de julio.
El pasado sábado el imputado circuló sin autorización por el lecho de la laguna, donde se quedó empantanado. Como sanción, debió donar $20.000 al hospital Cullen de la capital provincial.
Plásticos contaminados por una multiplicidad de químicos utilizados en la producción de frutillas fueron descartados en la laguna Setúbal. Una realidad tan escabrosa como cíclica.
Vecinos de diferentes lugares de la costa santafesina llevaron adelante una limpieza simbólica de la costa del río. “La actividad busca visibilizar la problemática para concientizar a la población e instar al estado al cumplimiento de la ley 13.055”, le dijo a Conclusión Facundo Viola.
El cuerpo sin vida de Juan Carlos Arredondo fue encontrado en las aguas del espejo santafesino luego de dos semanas de búsqueda. Fue en cercanías del lugar donde estaba su compañero el 31 de mayo.