Roberto Fernández aclaró que la medida de fuerza que tiene paralizado el servicio de unas 80 líneas de colectivos de Capital Federal y otras ciudades del país no está convocada por la UTA y que el paro "obedece a los desacuerdos de la empresa DOTA con el Ministerio de Transporte".
Repudiaron el accionar y ratificaron su reclamo de democracia sindical en la organización que lidera Roberto Fernández.
Es por el despido de dos trabajadores y en reclamo de la reparación de las unidades que transportan a alrededor de 200.000 pasajeros diarios.
Así lo denunció la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Comisión Gremial Interna en el Ministerio de Trabajo porque aún "no cumplen tareas los 10 despedidos y 20 suspendidos".
Los trabajadores reclaman solucionar los problemas en materia de seguridad e higiene en las distintas unidades en servicio y la reincorporación de los empleados despedidos.
Tras ello, los choferes ratificaron un paro por tiempo indeterminado en reclamo de mejoras en las medidas de seguridad de las unidades y la reincorporación de los empleados despedidos.
Al fracasar la reunión, se pasó a un cuarto intermedio hasta el viernes. El servicio de ese ramal permanece paralizado desde hace seis días, una medida que la empresa considera "injustificada".
La medida comenzó el viernes 14 en demanda del cumplimiento de mejoras en las condiciones laborales y de seguridad del servicio. Delegados de la empresa informaron que mañana tendrán una reunión en el ministerio de Trabajo.
Uno de sus delegados de base, manifestó que reanudarán las tareas con "servicios mínimos", por que todavía no se terminó con la tarea de revisión de las unidades.
Los trabajadores tenían previsto concurrir nuevamente este miércoles a la sede del Ministerio de Trabajo para firmar la conciliación obligatoria, la reunión con Tomada adelantó la solución del conflicto.
Se hará este viernes en Plaza San Martín desde las 12 bajo la convocatoria de distintas organizaciones sociales y sindicales. Condenan el uso de la violencia como respuesta a reclamos sociales.
El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, vaticinó lo que se vendrá porque es la fecha de pago de salarios y estimó que los empleados "van a percibir cero" pesos ya que no hubo días trabajados.