La contundente victoria en las últimas horas de sus candidatos para la presidencia de la Cámara de Diputados y el Senado, los conservadores Arthur Lira y Rodrigo Pacheco, respectivamente, fortalecieron al presidente de Brasil. Si la Corte confirma la parcialidad del ex juez Sérgio Moro, se abre otro escenario con Lula -que pasó 510 días en una celda solitaria- como posible candidato.
El presidente del Sindicato de Metalúrgicos de Bahía, Julio Bomfim, dijo que la decisión de la empresa es un “crimen” contra 12.000 empleos y pidió que se investigue la concesión de créditos estatales y exenciones impositivas otorgadas.
El presidente brasileño se refirió a los incidentes en el Capitolio: "Yo seguí todo, saben que estoy vinculado a Trump y saben cuál es mi respuesta. Mucha denuncia de fraude. Yo creo que sí, hubo fraude descarado". El ex presidente dijo estar preocupado "si se siguen siendo toleradas las violaciones a la libertad y a los derechos".
Las encuestas anticiparon que el partido del presidente Jair Bolsonaro podría ser derrotado por la derecha moderada y diversas izquierdas en algunas ciudades importantes, sobre todo en las dos más pobladas del país, San Pablo y Río de Janeiro.
El ex presidente boliviano agradeció el apoyo de Alberto Fernández y de Cristina Fernández durante su estadía en Argentina. El titular de la OEA también saludó la victoria del MAS, mientras que su rival, Carlos Mesa, reconoció la derrota.
Con el argumento de “combatir la corrupción” que se convirtió en la plataforma esencial para que finalmente Jair Bolsonaro gane las elecciones presidenciales, en octubre de 2015 unos 17 agentes del FBI y del Departamento de Justicia de Estados Unidos, viajaron a la ciudad de Curitiba para urdir el plan con el entonces juez Sergio Moro.
Esta decisión la tomaron los tres jueces del Tribunal Regional Federal de la 4ª Región de Brasil, basándose en el delito de corrupción en el uso de una finca en Atibaia por parte del expresidente.
En su discurso enunciado durante el encuentro del Grupo de Puebla, el dirigente peronista, que asumirá la presidencia el próximo 10 de diciembre, se refirió a las escaramuzas de los últimos días a raíz de dichos del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. Además, habló de Lula y su liberación.
En el día después de recuperar la libertad tras casi 600 días en prisión, el ex mandatario de Brasil apuntó al actual presidente y el juez que lo condenó, hoy ministro. “Dudo que duerman tranquilos”, dijo. Bolsonaro y su hijo lo atacaron por Twitter.
Ante una multitud, Lula dejó la prisión está tarde luego que el jueves la Corte Suprema decidió que todos los presos sin sentencia firme deben esperar la resolución en libertad. "Salgo de aquí sin odio, a los 74 años tengo espacio para el amor porque el amor va a vencer", dijo el ex presidente.
La fórmula triunfadora en las elecciones presidenciales del pasado 27 de octubre se expresó en redes sociales a partir de la salida en libertad del ex mandatario de Brasil, tras estar apresado 580 días en Curitiba.
Da Silva, ex presidente de Brasil, está preso hace un año y siete meses por un presunto caso de corrupción en el que se lo acusa de aceptar un departamento como soborno.