La vocera de Cancillería, Maria Zajarova, afirmó que la “acusación directa a Rusia es autorreveladora” y expuso que “aún no se ha realizado ninguna examinación forense, pero Occidente ya ha sacado conclusiones”.
Desde la institución detallaron que “se llevaron a cabo todas las medidas de reanimación necesarias, pero no dieron resultados positivos. Putin fue informado, pero aún no conoce las razones del deceso.
La condena que cumplía en “régimen normal” será cambiada a partir de la ratificación en “régimen severo”. Está acusado de malversar millones de rublos de donaciones y sus abogados adelantaron que presentarán un recurso contra la sentencia.
Desde hace más de un año viene cumpliendo una condena de dos años y medio de cárcel. Los investigadores lo acusan de desviar millones de rublos de donaciones vertidas a sus organizaciones para la lucha contra la corrupción y de desacato al Tribunal.
Actualmente está preso en una colonia penal en Pokrov, a unos 100 kilómetros al este de Moscú. El proceso iniciado este martes se desarrolla en el mismo lugar, algo que fue denunciado por sus seguidores como una forma de limitar la difusión del juicio.
A las personas y organizaciones así catalogadas se les prohíbe interactuar con los medios de comunicación, publicar información en línea, organizar eventos públicos, participar en elecciones y utilizar algunos servicios financieros.
El Comité de Investigación ruso dijo que el Fondo contra la Corrupción (FBK) fundado por Navalny "incitó a los ciudadanos a cometer actos ilícitos", en particular "a participar en concentraciones no autorizadas".
La decisión se produce tras meses de represión de la oposición rusa, marcada por el envío a una colonia penitenciaria de Alexey Navalny, de 45 años, así como por el exilio de varios líderes de su movimiento.
Su mujer, Julia Navalnya, compartió una fotografía del traslado de su esposo en agosto e ironizó con que guardó la imagen como "recordatorio" de cómo el opositor al presidente ruso violaba "conscientemente" las leyes de su país.
La acción tiene que ver con el hecho de que a los abogados del opositor al Gobierno de Vladimir Putin se les prohibió acudir a una cita con teléfonos y laptops.
El servicio de inteligencia financiera las incorporó en una lista en la que ya figuraban, entre otros, grupos yihadistas como Al Qaeda y el Estado Islámico. El FBK de Navalny ya no podrá, por ejemplo, publicar contenidos en Internet ni organizar manifestaciones.
La medida está vinculada a un proceso por “extremismo” cuya primera audiencia preliminar tuvo lugar este lunes a puertas cerradas. Podría haber duras penas de prisión para los colaboradores y seguidores del opositor.