El secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, se encontró en Beijing con el canciller chino, Qin Gang, en el primer viaje de un diplomático estadounidense a aquel país en cinco años.
Antes del viaje, el funcionario estadounidense habló por teléfono con el ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, y dijo que "plantearía las áreas de preocupación, así como las áreas de potencial cooperación". El canciller chino dijo que “está claro quién es el responsable”.
Qin Gang dijo que su país espera que “la administración estadounidense escuche concienzudamente la voz de los dos pueblos, elimine la ansiedad estratégica sobre la ‘inflación de amenaza’ y abandone la mentalidad de la Guerra Fría”, entre otras cuestiones.
El secretario de Estado de los Estados Unidos arribará al gigante asiático el 5 de febrero y se reunirá con el canciller Qin Gang. El vocero de Pekín dijo que las relaciones entre ambos siempre se dieron en un marco de respeto mutuo, coexistencia pacífica y cooperación de ganancias.
Mientras que la vocera de Exteriores del gigante asiático, Mao Ning, expuso que esperan ver cómo “más y más personas” son capaces de “entender y apoyar” la iniciativa del magnate, voceros del partido gobernante en la isla la rechazaron de plano.
El ex secretario de Estado de los presidentes Gerald Ford y Richard Nixon dijo en la cena de gala anual del Comité Nacional de Relaciones de Estados Unidos – China que “es imperativo encontrar un camino para la coexistencia y la cooperación”.
Qin Gang es un funcionario del área de carrera quien dijo que se esforzará “en construir canales de comunicación y de cooperación con todos los sectores de Estados Unidos.