Lautaro Insúa, de 18 años, fue el joven agredido por tres rugbiers, y por la golpiza sufrió fracturas de tabique nasal y de pómulo, heridas que demandarán cirugía reconstructiva.
La fiscal Verónica Zamboni, presentó el requerimineto ante el juez de Garantías David Mancinelli, a un día de que se cumplan diez meses del crimen y de que venciera el plazo para hacerlo. Además solicitó que los dos rugbiers que se encuentran en libertad, imputados como "partícipes necesarios", Juan Pedro Guarino y Alejo Milanesi, sean sobreseídos,
La pericia se conoció este viernes, apenas horas antes de que se cumplan seis meses del brutal crimen "en manada" a Fernándo Báez Sosa, perpetrado en manada por un grupo de rugbiers, según se reveló hasta ahora en la investigación.
Los ocho rugbiers continuarán detenidos en la alcaidía 3 de Melchor Romero, imputados como coautores del delito de "homicidio agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas"
Dos de los rugbiers acusados por el crimen ocurrido el 18 de enero pasado a la salida de un boliche de Villa Gesell quedaron más complicados. Ahora, la fiscal Zamboni aguarda el resultado de la pericia de scopometría a la zapatilla atribuida a Máximo Thomsen.
La medida fue adoptada por la Cámara de Apelaciones y Garantías de Dolores, en respuesta al planteo del abogado defensor Hugo Tomei.
Los jóvenes permanecieron por más de una hora ante la fiscal Verónica Zamboni, donde se negaron a declarar y no presentaron ningún escrito. Ambos continuarán en libertad.
Máximo Thomsen y Ciro Pertossi se negaron a declarar formalmente ante la fiscal Verónica Zamboni, aunque le hicieron cuestionamientos respecto a la instrucción y a la anterior indagatoria del 19 de enero pasado.
Ahora será el juez Mancinelli quien resuelva el planteo, probablemente por escrito, ya que al haber personas detenidas en el marco no quiere demorar su decisión.
El abogado de la familia Báez Sosa dejó trascender los dichos del único acusado que habló en la audiencia.
“Nosotros tenemos a nuestro hijo acá y nos sentimos mal por los padres de Fernando, pero no hicimos nada”, manifestó el padre de Juan Pedro Guarino.
Se trata de Juan Pedro Guarino y de Alejo Milanesi quienes no habían sido identificados ni por testigos ni por las cámaras del lugar del asesinato. El fiscal general de Dolores dijo que aún "están sometidos a proceso hasta que se completen los elementos de prueba".