Ucrania dijo este miércoles que Rusia atacó con drones una sureña ciudad ubicada sobre el río Danubio y provocó daños en infraestructura portuaria crucial para las exportaciones de cereales y a casi 40.000 toneladas de granos.

Los ataques a la ciudad de Izmail llegaron luego de que quedara sin efecto, el mes pasado, un acuerdo con Rusia que permitía a Ucrania exportar al mundo sus cereales desde Odesa y otros puertos del mar Negro.

Unos 500 kilómetros más al norte, la ciudad de Kiev, la capital de Ucrania, también fue blanco de aviones no tripulados explosivos lanzados por Rusia, pero todos fueron derribados, dijeron autoridades ucranianas.

Dos puertos fluviales de la provincia de Odesa, Reni e Izmail, se han convertido en la principal ruta de salida de los productos agrícolas ucranianos desde que Rusia se retiró del pacto que permitía a Kiev exportar sus cereales por el mar Negro pese a la guerra.

Desde entonces, Rusia multiplicó los ataques a las infraestructuras portuarias ucranianas, sobre todo en el mar Negro, y lanzó otro contra el puerto de Reni, ubicado en el suroeste de Ucrania, cerca de la frontera con Rumania, en el delta del Danubio.

El jefe de la Oficina Presidencial de Ucrania, Andriy Yermak, dijo que los ataques tuvieron por blanco a Izmail, donde se ubica el más grande de los puertos ucranianos en el Danubio y que tiene unos 71.000 habitantes.

El ministro de Infraestructuras de Ucrania, Oleksandr Kubrakov, dijo que los drones «dañaron» casi 40.000 toneladas de granos que estaban guardados en almacenes y silos y destinados a la exportación.

La Fiscalía General de Ucrania explicó que el ataque tuvo por blanco «instalaciones portuarias y la infraestructura industrial en el Danubio» y dañó un elevador, varios silos de cereales, tanques de terminales de carga, depósitos y locales administrativos.

El Ejército ucraniano dijo en Telegram que el «objetivo evidente» del ataque con drones «era la infraestructura portuaria e industrial de la región» de Odesa.

No se reportaron víctimas a pesar de que los ataques causaron un incendio, dijo el gobernador de Odesa, Oleg Kiper, en Telegram.

El puerto de Reni, ubicado al oeste del de Izmail, ya había sido atacado el 24 de julio por Rusia.

El presidente rumano, Klaus Iohannis, dijo en Twitter, rebautizada ahora X, que los ataques de Rusia contra la infraestructura civil ucraniana en el Danubio eran «inaceptables» y constituían «crímenes de guerra».

Su homólogo ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo que «el mundo debe reaccionar» y denunció a «los terroristas rusos» que atacan «de nuevo puertos, cereales y la seguridad alimentaria mundial».

Antes de los puertos del Danubio, las fuerzas rusas habían atacado las infraestructuras portuarias ucranianas del mar Negro varias veces en las últimas semanas, particularmente el puerto de Odesa.

Los bombardeos comenzaron después de que Rusia se retirara del acuerdo que, bajo los auspicios de la ONU y Turquía, había permitido la exportación de 33 millones de toneladas de cereales ucranianos, a pesar de la invasión rusa, por el mar Negro.

En tanto, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, dijo este miércoles a su par ruso, Vladimir Putin, que su Gobierno buscará reactivar el pacto, que se firmó en julio del año pasado en Estambul y cuyo nombre oficial es Iniciativa del mar Negro.

Durante una entrevista telefónica, Erdogan le dijo a Putin que considera el acuerdo «un puente para la paz» y que Turquía «seguirá realizando intensos esfuerzos y gestiones diplomáticas para lograr la continuidad de la Iniciativa del mar Negro».

Los dos líderes también «acordaron la visita de Putin a Turquía», agregó la nota, sin adelantar el calendario, informó la agencia de noticias AFP.

Erdogan ya había dicho el mes pasado que esperaba al presidente ruso en agosto.

El 17 de julio, Rusia anunció que se retiraba del pacto porque no se habían cumplido las exigencias que venía formulando para volver a prorrogarlo, incluyendo que se le permitiera exportar fertilizantes pese a las sanciones occidentales por haber invadido Ucrania.

Un comunicado del Kremlin sobre la conversación entre Putin y Erdogan dijo que «se confirmó la disposición (de Rusia) de retornar al acuerdo de Estambul apenas Occidente realmente cumpla con todas las obligaciones hacia Rusia.

La nota agregó que continuaban los preparativos para un «posible encuentro» entre Putin y Erdogan.

En Ucrania, en tanto, el jefe de la administración militar de la capital, Sergiy Popko, aludió a que varios drones penetraron simultáneamente en el cielo de la ciudad desde varias direcciones.

«Todos los objetivos, más de diez drones, fueron detectados y destruidos a tiempo», aseguró, aunque restos de los aparatos cayeron en tres distritos sin causar muertes ni heridos, dijo Popko por Telegram.

«Hay daños en locales no residenciales y en la superficie de las carreteras, sin destrucción ni incendios graves», agregó.

En el barrio de Holosiiv, restos de los drones cayeron en una zona de recreo y en un edificio no residencial, según la administración militar.

Así, el martes Rusia afirmó haber frustrado una ola de ataques aéreos y marinos con aviones no tripulados contra Moscú, la península ucraniana de Crimea, anexionada por Rusia, y la flota rusa en el Mar Negro.

Un rascacielos en el distrito financiero de la capital rusa resultó dañado por segunda vez en pocos días.

Los ataques contra Moscú y sus alrededores han aumentado desde principios de año, con una incursión de drones que incluso apuntó al Kremlin en mayo.

En respuesta, el ministro de Defensa ruso anunció el lunes que Moscú estaba intensificando sus ataques en Ucrania.