Trabajadores estatales, docentes, del área de salud y municipales de distintas ciudades de toda la provincia ejecutan desde primera hora de este martes un paro por 48 horas en reclamo de mejoras en la oferta de aumento salarial que hizo el Gobierno.
La huelga fue acompañada por una masiva manifestación que recorrió las principales calles de Santa Fe y se concentró frente a la Casa de Gobierno provincial. En Rosario la movilización se replicó especialmente por parte de municipales nucleados en la Festram.
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Desde el Ejecutivo provincial sólo se pronunció la ministra de Educación, Claudia Balagué, quien volvió a advertir que se aplicarán descuentos por los días no trabajados y cuestionó la dureza de la medida de fuerza.
La ministra señaló que en la asamblea de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) «no se puso en ningún momento la moción de aceptar» el ofrecimiento salarial que hizo el gobierno, ya que solo había propuestas de paros por 48 
o 72 horas.
«Es una democracia muy particular”, disparó en declaraciones a radio Eme.
La funcionaria adelantó que es intención del gobierno descontar los días de paro y consideró que «es llamativa una medida de fuerza tan dura. Estamos hablando de 48 horas una semana y 48 horas más, la otra (entre el 3 y 4 de abril), teniendo en cuenta que venimos de un ciclo de paro”.
Balagué tuvo una respuesta por parte de la jefa de Amsafé, Sonia Alesso, quien sostuvo que «el gobierno está caminando por un costado peligroso» porque a su entender «el camino es el diálogo en la mesa paritaria».
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Desde la movilización a Casa de Gobierno, Alesso señaló que «las amenazas de la provincia han reforzado el paro y la movilización» y opinó que «las represalias nunca son el camino de la democracia».
«Las relaciones laborales se tienen que resolver dialogando. El gobierno rompe el diálogo cuando pide que acepten una rebaja del salario. No puede seguir amenazando, tiene que llamar a paritarias, tiene que resolver el problema del poder adquisitivo de los trabajadores”, completó.
Por su parte, Martín Lucero, titular del gremio de docentes privados (Sadop), aseguró a Conclusión que hubo un “acatamiento muy importante, cerca del 90%” de la medida de fuerza, al tiempo que pidió “que el gobierno entienda que el reclamo no es más ni menos que tener un sueldo que refleje la situación que se vive en la actualidad”.
Con pequeños matices por sectores, el Gobierno de Santa Fe ofreció un aumento salarial del 10 por ciento a partir de marzo y la aplicación de la «cláusula gatillo» una vez que la inflación acumulada supere ese porcentaje.
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Además, incluyó una cláusula de revisión en caso de una caída abrupta de los recursos fiscales y si la «gatillo» no puede ser pagada.
La oferta oficial fue rechazada por la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN), la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé), el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (Sadop) y por la Unión Docentes Argentinos (UDA).
«La medida de fuerza realizada por los trabajadores tiene un altísimo nivel de adhesión a lo largo y ancho del territorio santafesino en reclamo de mejores salarios», aseguró ATE en consonancia con lo informado por los otros sindicatos en conflicto.
Se sumaron a la huelga los afiliados de la Asociación de Médicos de la República Argentina (Amra) y del Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus), en ambos casos con atención de guardias mínimas en hospitales y centros de salud.
En otra negociación, la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (Festram) rechazó una oferta similar a la del Gobierno santafesino presentada por los representantes paritarios de los municipios y comunas.
Fotos de la marcha en Santa Fe:
