Conclusión Buenos Aires -Aldo Battisacco
El ex Diputado Nacional y ex ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani, dialogó con Conclusión sobre el anuncio que realizó el vocero presidencial, Manuel Adorni el lunes en relación a la decisión de la administración Milei, de importar productos de la canasta básica y medicamentos cuyo precio en el mercado local es superior al precio internacional, y caracterizó que el futuro propone un desafio cierto y peligroso.
El gobierno resolvió impulsar medidas para mejorar la competencia y apuntalar la baja de la inflación en los productos de la canasta básica y medicamentos. Para apuntalar esta iniciativa el BCRA reducirá el plazo de pago de importaciones de alimentos, bebidas y productos de limpieza, cuidado e higiene personal.
Para efectivizar esta respuesta a la inflación el gobierno anticipó suspender, por el plazo de 120 días, el cobro de la percepción de IVA adicional e impuesto a las ganancias a las importaciones de estos productos y de los medicamentos.
Tras el anuncio distintas Cámaras empresariales salieron al ruedo para hacer sentir su opinión sobre los riesgos que entraña la importación de alimentos para la industria local y cuál será el impacto en la pequeña, mediana y gran industria del sector.
Contigiani sostiene que el «anuncio de que se importara alimentos es muy malo para las pymes, porque la estructura de alimentos y de comercialización es concentrada que no compite y no quiere competir, pero sabemos también que se trata de la misma estructura concentrada en pocas empresas tanto en alimentos y locales comerciales que importa. Es decir, produce e importe. Hablamos de empresas que están en manos extranjeras y a los grandes supermercados que perjudicarán de manea directa a las pequeñas y medianas empresas que no tienen o no saben o no importan».
En la misma línea expresó el exfuncionario. » Estamos ante una medida que destruirá empleo, destruir a la pequeña y mediana empresa y a concentrar mucho mas de lo que esta la económica en el rubro alimentos de Argentina. Este se circunscribe en un modelo económico que lleva a cabo el gobierno que se define como un modelo de crueldad social. De mucha crueldad social para los trabajadores, la clase media, los sectores de menos recursos».
Frente a esto sugiero en los ámbitos provinciales diseñar politicas contra cíclicas que sostengan producción, empleo y actividad
El ex legislador sentenció que este modelo no es nuevo «tiene mucho dogmatismo y fanatismo que en el medio de muchas dificultades, permite a la vez una traslación de recursos de una forma que es imperdonable, porque es a manos de los sectores concentradas en el área de la energía, los servicios y los alimentos».
En este contexto «el gobierno chocó contra una pared en su necedad se dio cuenta que la inflación no es un fenómeno monetarios, la realidad lo abofeteo, y ahora reconoce con las suplicas de Caputo a los empresarios, no es solo un tema monetario, o de déficit fiscal. Se dieron cuenta que estamos ante una estructura concentrada de producción y comercialización de alimentos».
El tema dista mucho de ser novedoso, el 18 de septiembre en la Cámara de Diputados de la Nación, Carlos Pellegrini sostendría que: «Todo país debe aspirar a dar desarrollo a su industria nacional; ella es la base de su riqueza, de su poder, de su prosperidad; y para conseguirlo debe alentar su establecimiento, allanando en cuanto sea posible las dificultades que se opongan a él. (..). El librecambio es la última aspiración de la industria, que solo puede hallar en ella su pleno desarrollo, (…).Pero (?) no se deduce que no debamos abrigarla al nacer.(?), el librecambio mata la industria naciente. Es necesario que en la República se trabaje y se produzca algo más que pasto.
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