El preocupante panorama económico actual cierne una amenazante proyección para fin del 2018 y el primer semestre de 2019. La escalada del dólar, la inflación y la caída del salario real proyectan una creciente recesión que impactará directamente sobre el mercado laboral. La semana pasada se conocieron estimaciones privadas sobre la inflación del mes de septiembre que el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) dará a conocer el miércoles próximo. Según los estudios, el índice de precios se ubicará en el nivel más alto de los últimos meses, ubicándose entre 5,5% y 7,7%. Sumado a este crítico panorama, se conoce el trabajo de la consultora Ecolatina sobre el desempleo que recrudece la situación.
Según el estudio, sobre el final del 2018 el mercado laboral se verá fuertemente afectado por la implicancia de la inflación y la devaluación. Es que, estiman, el desempleo se acercaría a 11% y con ese escenario, la pobreza volvería a la zona del 30%. Por otra parte, el salario real podría caer hasta 8% en el segundo semestre.
En el informe, Ecolatina explica que los sucesivos saltos del dólar aceleraron la inflación y su consecuencia directa es el impacto en el salario real, que comenzará a perder un 2,6% interanual en el segundo trimestre.
En cuanto a los indicadores laborales, Ecolatina analiza que “en la Encuesta de agosto se continúa mostrando una magra tasa de entrada (al mercado de trabajo; comportamiento típico del mercado laboral en períodos recesivos), que se encuentra desde junio en niveles mínimos, y también un incremento de la tasa de salida (relaciones laborales que cesan). Además, se reflejó un incremento en el porcentaje de empresas que aplicaron suspensiones a su plantilla debido a una caída de la producción y de la demanda”.
En ese sentido, la consultora pone el acento en la «perdida del poder de negociación» para los trabajadores: “Considerando que la destrucción de empleo se profundizará en lo que resta del año, el poder de negociación de los trabajadores (aumentan los desocupados y el temor a perder el empleo) se verá afectado y, con ello, la capacidad de revertir el deterioro del salario real. En este sentido, estimamos que la caída del salario real formal superaría en promedio el 6% interanual en 2018, liderada por los empleados registrados en el sector público (baja de 8%)”.
En este contexto, Ecolatina concluye que “la tasa de desocupación volvería a los dos dígitos en el segundo semestre y alcanzaría 10,7% y 10,5% en el tercer y cuarto trimestre de 2018, respectivamente, lo que implica un alza de 2,4 y 3,3 puntos porcentuales en relación a igual período de 2017”.
