Tras la derrota del Gobierno en las Paso, el dólar se disparó este lunes 23% respecto del viernes último, a $51,20 para la compra y $57,30 para la venta, según el promedio elaborado por el Banco Central. La divisa norteamericana había cerrado el viernes último a $ 46,47 en el mercado minorista.

El Banco Central salió a vender unos US$ 100 millones para evitar que la divisa quede por encima de los $ 60, como ocurrió en casi toda la jornada financiera. Y la tasa de interés de las letras de Liquidez saltó hoy por encima del 74%, lo que representa un avance de 11 puntos porcentuales del cierre del viernes cuando quedó en 63,706%.

Pero ante la escalada del dólar, Macri recién salió a hablar a la población a las 16, cuando la divisa ya había cerrado y el aumento estaba concretado. “Hoy somos todos más pobres que antes de las Paso”, se sinceró Macri.

>Te puede interesar: Macri buscará “revertir” el resultado pero no hizo autocrítica: «No me puedo hacer cargo de los mercados»

En primer lugar el mandatario agradeció a los más de 7 millones de argentinos que lo acompañaron con su voto. Sin embargo el discurso del presidente se centró en responsabilizar al kirchnerismo y, en definitiva, a los ciudadanos que lo votaron.

Macri no realizó autocrítica y culpó de la corrida cambiaria a los argentinos por su voto y al kirchnerismo. “Hoy se fueron muchos inversores que habían venido el viernes para generar trabajo”, dijo Macri. Y agregó que en este punto el kirchnerismo tendría que hacer «una autocrítica» para tratar de «construir esa credibilidad que hoy no tiene». “Ojalá que el kirchnerismo se haga cargo y revierta esta situación”, ratificó.

Inexplicablemente, el presidente culpó de la situación a su adversario político, como si él no fuese quien lleva los destinos del país. «Yo me comprometo como presidente a garantizar toda la institucionalidad y la convivencia que me corresponde. Alberto Fernández y el kirchnerismo tienen más responsabilidad de tranquilizar a la comunidad económica local, mundial, para no generar más daños sobre la economía», apuntó y pidió que «el kirchnerismo se haga cargo de la expectativa electoral que generó».

«Por más que nosotros contengamos al dólar durante todo el proceso electoral, si se confirmase que el kirchnerismo gana la elección en octubre o en noviembre, el problema va a estar», anticipó el mandatario.

>Te puede interesar: El dólar se disparó tras las Paso: cerró a $57,30 y reina la incertidumbre

Amigos beneficiados, pueblo castigado

Mientras los bancos públicos convalidaban la divisa a $60, los privados más cercanos al Gobierno llegaban a venderla a $65, tal fue el caso del Banco Hipotecario, del empresario amigo de Macri, Eduardo Elsztain, y el Banco Supervielle, de una de las familias que más aportaron a la campaña de Juntos por el Cambio.

El Banco Central dejó subir la cotización para finalmente intervenir y bajarla a 55 pesos hacia el final de la jornada. El Gobierno usó así la devaluación para castigar al electorado y extorsionarlo en caso de repetir las preferencias en la elección definitiva.

El Banco Nación vendía el dólar por la mañana apenas comenzada la jornada a $61, por encima de algunos bancos privados. Lo mismo hizo el Banco Provincia de Buenos Aires, que abrió la jornada a $61 acentuando la devaluación.

El Banco Hipotecario, del amigo de Macri, Eduardo Elsztain, fue otro de los que vendió más cara la divisa, a $65.