Por Aldo Battisacco desde Buenos Aires (enviado especial)

El líder camionero y secretario de Organización de la Confederación General del Trabajo (CGT), Pablo Moyano, le dijo a Conclusión luego de presidir la reunión que tuvo como protagonistas a los delegados de las regionales en el edificio de la CGT de calle Azopardo que si «el gobierno gana en octubre nos pega la reforma laboral en la frente».

Moyano aclaró en relación a los fuertes rumores que circularon respecto de un posible quiebre de la unidad del triunvirato que «hay que entender que el consejo directivo está conformado por tres sectores, la CGT de Antonio Caló, la de Luis Barrionuevo y la de Hugo Moyano, y más allá de alguna diferencia que podemos tener, ayer se consensuó la marcha y seguir defendiendo a los trabajadores», subrayó.

Consultado por Conclusión cual era su expectativa del acto que se realizará en Plaza de Mayo el martes próximo, el gremialista dijo con convicción que «la marcha del 22 de agosto será masiva».

Luego de adelantar que la seguridad de quienes participen de la movilización estará a cargo de 5.000 camioneros y que el horario previsto para que se desarrolle todo normalmente se estipuló entre la 15 y 18, destacó la importancia de la iniciativa cegetista, por el tipo de «mensaje que recibirá el gobierno con una masiva movilización».

En relación a como visualiza un futuro triunfo de la Alianza Cambiemos, y que efectos espera, el sindicalista afirmó: «Estamos convencidos que si gana las elecciones el gobierno el 22 de octubre se viene un ajuste brutal, los más afectados y golpeados serán los estatales nacionales y los municipales».

Y añadió: «En Brasil -tema que charlamos con los compañeros- el presidente de ese país con sólo un 5% de aceptación popular, y un parlamento cuestionado votó la reforma laboral».

Preguntado si el movimiento obrero está en estado de alerta, Moyano contestó que «sí, el triunfo de Mauricio Macri en las generales de octubre, nos promueve a imaginar que tendremos la reforma laboral en la frente».

Seguidamente, el secretario de Organización de la cúpula cegetista subrayó con énfasis que «todos saben y conocemos lo que significa la reforma laboral, nos pasó en los 90», y «fueron momentos en los que el movimiento obrero resistió a través del MTA», recordó.

A renglón seguido, el camionero puso sobre la palestra «los acontecimientos en torno a la ley Banelco, que significó para los trabajadores perder derechos, porque se les modificaron los convenios colectivos de trabajo, lo que se traduce según dicen los liberales, achicar el costo laboral», ironizó.

También enumeró algunos efectos de las modificaciones que hicieron retroceder a los trabajadores en sus conquistas, y señaló que «el achique de la capacidad de consumo de los sueldos porque serán menores, y el cambio en las condiciones de trabajo, a lo que se le suma achique de personal incrementando los despidos y suspensiones, es lo que nos puede ofrecer el gobierno».

Respecto de la actitud que tomará la conducción cegetista, Moyano adelantó que «hay un sector importante del movimiento obrero y de los trabajadores que resistirán esa embestida que se viene».

Además, Moyano calificó que el actual oficialismo «es un gobierno de derecha, y no es casualidad que una vez que Cambiemos obtuvo estos resultados en las urnas en 2015, entre las primeras medidas estuvo la rebaja de las retenciones al campo, a las mineras pero con los trabajadores no cumplió, seguimos esperando que supriman el impuesto a las ganancias».

Por último, Pablo Moyano cargó contra las políticas del elenco de Balcarce 50, sobre quienes desgranó: «A pesar que este fue uno de los ejes de campaña, y a casi dos años de acceso al poder del gobierno, siguen los despidos, a lo que se le suma la invasión de productos importados que no hace otra cosa que destruir el mercado interno», concluyó.

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